Arquitectos dudan de la licencia otorgada para el teatro de Banderas

Málaga/La licencia de obras concedida por la Gerencia de Urbanismo el pasado mes de marzo para la transformación del Teatro Alameda y su conversión en el espacio cultural a gestionar por el actor Antonio Banderas ha generado la duda del Colegio de Arquitectos de Málaga. El colectivo dispone de un informe interno, realizado en base al proyecto de ejecución facilitado por el arquitecto de la iniciativa, que vendría a concluir la necesidad de que la intervención requiriese de una licencia de obra mayor y no menor, que es justamente la que otorgó el departamento municipal.

Si bien oficialmente desde el colectivo se elude entrar en profundidad sobre este asunto, este periódico sí pudo saber de la existencia del mencionado análisis técnico. Muestra de los interrogantes que la actuación ha generado en el ente dirigido por el decano Francisco Sarabia es que días atrás se solicitó formalmente a Urbanismo la vista del expediente completo sobre la reforma del Teatro Alameda.

"Antes de hacer pronunciamiento es necesario conocer todo el expediente", indicaron desde el colegio, al tiempo que mostraron prudencia al respecto ante la posibilidad de que más allá del proyecto de intervención exista algunos otros detalles ignorado hasta el momento. Preguntado sobre este proceder, el propio decano confirmó la petición del expediente y destacó que es una "buena oportunidad para conocer los criterios de interpretación que hace la Gerencia de Urbanismo a la hora de otorgar licencias para este tipo de intervenciones".

Ante este asunto, otras fuentes del sector fueron claras al señalar que se haberse tratado de otro promotor la licencia exigida hubiese sido mayor y no menor. "A uno de a pie que hubiese presentado esa obra le piden mayor", indicaron. Una de las claves en esta interpretación es que la actuación planteada sobre el Alameda incorpora la ejecución de un ascensor de nuevo cuño, lo que, según las fuentes, suele ser objeto de una licencia de obra mayor.

De acuerdo con los datos recogidos en la licencia, el presupuesto de ejecución material de la actuación se eleva a casi 2,4 millones de euros. Es decir, que incluyendo otros conceptos técnicos, impuestos y las instalaciones propias del uso planteado la suma se dispara por encima de esta suma. El plazo estimado para los trabajos es de cerca de un año, fijándose la posible reapertura del inmueble para septiembre de 2019.

Conforme a la propuesta de actuación planteada por la promotora del proyecto, Teatro del Soho, la intervención "mantiene la gran sala del teatro en planta baja y convierte las dos salas de cine superiores en un única sala de ensayos y pequeñas representaciones; se reforma interiormente los distintos espacios para adaptar los vestíbulos, zonas de circulación, aseos y demás dependencias a las necesidades actuales". Al tiempo, en el expediente se añade que la obra permitirá incorporar las oficinas de la planta primera a la propuesta como parte administrativa del teatro.

Y "se instala un nuevo ascensor en una de las cajas de la escalera para mejorar la accesibilidad del edificio", y destaca que si bien las fachadas del actual edificio no se modifican, sí "se dispone un nuevo revestimiento en planta primera, segunda y tercera hacia la calle Córdoba, y en planta primera hacia calle Casas de Campos, que recupera el hueco central que ilumina el foyer conforme a su estado original; este revestimiento sirve para destacar el uso del teatro respecto al resto del edificio, en consonancia con su carácter de equipamiento público, manteniendo la composición general del edificio al que pertenece".