Avances en la ejecución de un gran centro logístico en los terrenos de Intelhorce, en Málaga

El desarrollo definitivo y completo de los antiguos suelos de Intelhorce, donde luce ya desde hace meses la fábrica de Mayoral, parece algo más próximo. La empresa aragonesa Montepino Logística avanza en el trámite final para impulsar en los próximos meses las obras de construcción de un centro logístico de alta capacidad, de unos 50.000 metros de techo, mediante el que dar solución al proceso de transporte, entrega urbana y distribución last mile.

El modelo contemplado permitirá reducir los plazos de entrega y recogida de mercancías en las zonas urbanas, "mejorando la experiencia del cliente en el e-commerce". El desembarco de la firma en la provincia de Málaga se conoció a finales de 2019, cuando informaron de la compra de unos 115.000 metros cuadrados en este histórico emplazamiento. En su totalidad, la inversión estimada es de unos 80 millones de euros.

Ahora, la compañía, referente a nivel nacional en este sector, tramita el estudio de detalle necesario para ordenar el desarrollo final. Una de las particularidades del documento en tramitación es que, a diferencia de un modelo anterior, unifica las cuatro parcelas situadas al sur dentro de una única manzana, validando de este modo la circulación de vehículos pesados de gran longitud acordes a la actual demanda y legislación sobre transporte por carretera.

Respecto al futuro ocupante de estas instalaciones, la empresa se limita a a apuntar en su web que se trata de una información "confidencial". No obstante, fuentes del sector inmobiliario de la capital hablan de la posibilidad de que ese cliente sea Amazon. Al ser preguntado por esta posibilidad, desde Montepino eludieron confirmar o desmetir tal extremo, aludiendo a la política de confidenclalidad existente.

No parece descartable que esta operación vaya adelante, toda vez que la multinacional de la venta por internet ya mostró su interés años atrás por disponer de una parcela de cierta envergadura donde implantar un centro propio. Ante la ausencia de parcelas que reuniesen esas condiciones, Amazon alcanzó un acuerdo para el arrendamiento temporal de unos terrenos de Adif. Y es en este punto donde cuenta con dos carpas provisionales desde mediados del año pasado.

El desarrollo impulsado por Montepino cuenta, según su página web, con 18.464 metros de superficie bruta alquilable (GLA), a los que sumar otros 16.378 metros cuadrados para almacenes y 2.086 metros de oficinas. Igualmente se perfilan 60.000 metros cuadrados de suelo para aparcamiento y zonas verdes. La reserva contemplada es de 769 plazas para vehículos ligeros.

Entre las obligaciones que debe asumir la empresa promotora, según se especifica en el estudio de detalle ya aprobado inicialmente, está la presentación de un informe de situación de los terrenos al solicitar una licencia de obras dado que los mismos acogieron actividades potencialmente contaminantes.

Si en base a ese informe, la Junta de Andalucía declarara el suelo como contaminado, los propietarios estarán obligados a las actuaciones necesarias para proceder a su recuperación ambiental. Igualmente, se tendrá en cuenta la afección arqueológica del yacimiento no42 "Fortaleza Romana de Campanillas" y el no50 "Antiguo Camino de Cártama".

Muestra de la envergadura de la operación es el valor económico en el que se estiman las obras de urbanización los terrenos, que alcanza los 6 millones de euros (valor de licitación). En cuanto a los plazos manejados, en el documento técnico se habla de que el plazo máximo para el inicio de las obras de urbanización y de las edificaciones será de 24 meses desde la aprobación definitiva del estudio de detalle.

Jesús Morlán, arquitecto de Montepino, admitió la imposibilidad de fijar un calendario definitivo hasta que no haya sido aprobado de manera definitiva el estudio de detalle, aunque confió en que el trámite final no requiera de un proceso muy largo. La confianza es que los primeros trabajos sobre el terreno puedan impulsarse en los primeros meses del año que viene. A partir de este momento, dio por seguro que el complejo podría estar completado en más o menos un año. Este escenario modifica el inicialmente contemplado por el grupo aragonés, que en su primera comunicación tras hacerse con la propiedad de la parcela apuntaba la posibilidad de arrancar las obras a lo largo de 2020 con la idea de tener listas las instalaciones en los primeros trimestres de 2021.