El Ayuntamiento de Málaga dicta ya 255 decretos de retirada de terrazas, 97 más que en todo 2018
Municipal
El control del área de Comercio se dispara en el primer trimestre, en el que las acciones crecen un 61% respecto al año pasado
"Vas andando por la calle y te das cuenta de que hay muchísimos excesos". El testimonio, que podría corresponder cualquier vecino del Centro histórico, fue verbalizado por la jefa de servicio de Vía Pública del área de Comercio, confirmando con ello la admisión de que son muchos los empresarios hosteleros los que sobrepasan las superficies que tienen autorizadas para instalar las terrazas de sus bares y restaurantes.
Pero frente a lo ocurrido en ejercicios anteriores ejercicios, en la actualidad este mismo departamento parece decidido a corregir estas irregularidades. Los números manejados por la concejalía encabezada por Elisa Pérez de Siles ponen en valor el esfuerzo de los nuevos responsables municipales. Y, en sentido contrario, pone en evidencia a los que estuvieron al frente de la función años atrás. Sirva como ejemplo que en los tres primeros meses del año la cifra de decretos emitidos para la retirada de terrazas alcanza los 255, un 61% más que en todo el año 2018.
De manera precisa, si en todo el año pasado (un hito a considerar es que fue en verano cuando entró en vigor la nueva Ordenanza de Vía Pública) la media fue de 0,4 decretos al día, entre enero y finales de marzo del presente ejercicio este parámetro crece a 2,8. El crecimiento es aún mayor si se toma como referencia 2017, cuando, según los datos oficiales, fueron apenas 74 los decretos de retirada incoados (0,2 de media al día).
Con estos datos sobre la mesa, Pérez de Siles quiere defender el esfuerzo que realizan los técnicos municipales dedicados a esta tarea. "Se están dejando la piel en la vigilancia y aplicación de la nueva ordenanza", expuso la concejala. A raíz de las manifestaciones de la jefa de servicio, en el marco de un encuentro con varios colectivos vecinales y sociales del casco antiguo, la edil se mostró comprensiva. "Lo que intentaba poner encima de la mesa es que las más de 200 órdenes ya emitidas son un ejemplo de lo que se está haciendo", añadió.
A su juicio, en la línea de lo ya expuesto por la trabajadora municipal, "es evidente que existen excesos de ocupación", que han de ser combatidas con la aplicación de la normativa municipal. La misma fija incluso la posibilidad, ante incumplimientos reiterados, de acordar la suspensión temporal de la autorización de terrazas a los infractores. Una vía de acción por la que incluso se mostró partidaria la jefa de servicio.
Pérez de Siles sí aclaró que en caso del Centro no existe "un exceso de autorizaciones sino de ocupación, que es lo que estamos intentando controlar". Asimismo, si bien coincidió en que se podría actuar más con más personal, aclaró que el área no dispone solo de un inspector, pero sí de un inspector dedicado en exclusiva a esta labor en el casco antiguo. A este trabajo se suma la participación de los agentes de la Policía Local, que son los que, mayoritariamente, están sobre el terreno controlando el cumplimiento o no de las terrazas.
El asunto que presumiblemente tendrá que seguir esperando es el de la aprobación de los planes de aprovechamiento con los que ordenar la ocupación de terrazas en seis puntos del casco antiguo. Si bien en agosto del año pasado desde Comercio se admitía la existencia de negociaciones con la asociación de hosteleros de la capital, la realidad es que esas conversaciones acabaron por enfriarse, en especial tras el conflicto generado entre el colectivo y el Ayuntamiento por la declaración de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) de 98 calles del Centro debido al exceso de ruido.
Temas relacionados
No hay comentarios