Los ayuntamientos deben respetar el derecho a la libre empresa y el de convivencia con el nuevo decreto de viviendas turísticas

Andalucía aprobó hace unos días el decreto de pisos turísticos que permite a los municipios limitarlos. Esta normativa permite a las localidades establecer limitaciones en cuanto al número máximo de viviendas turísticas que pueda haber en cada zona. En este sentido, el consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Arturo Bernal, ha asegurado que los ayuntamientos a la hora de aprobar nuevas normativas turísticas han de hacerlo para que se respeten el derecho a la libre empresa y el de la convivencia.

En Málaga, el número de viviendas turísticas no ha parado de aumentar en los últimos años. Concretamente, en la capital ya existen unas 6.550 y en la provincia esta cifra asciende a 39.041. Esto quiere decir que han aumentado un 10,05% y un 11,35%, respectivamente, en tan solo un año, según los datos de diciembre del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Con estos datos, el consejero de Turismo ha señalado que con esta nueva normativa reconocen “la competencia turística para los ayuntamientos de manera que cuando hagan sus correspondientes normativas urbanísticas van a poder incorporar normas turísticas de regulación u ordenación de alojamientos”.

De igual forma, ha remarcado que el decreto se aprobó el jueves pasado y hasta dentro de 20 días no entrará en vigor. Una vez que pase este plazo, las administraciones pueden “empezar a adaptar o a incorporar en sus normativas urbanísticas las correspondientes previsiones que ordenen y fomenten la vivienda turística”.

En este punto, ha hecho hincapié en que aquí se enfrentan dos derechos: el de libre empresa y el de la convivencia. Por ello los ayuntamientos han de “matizar” las normativas y trabajar para garantizar ambos derechos.

Asimismo, Bernal ha incidido en que con este decreto han “dibujado un marco de referencia nuevo, ambicioso y profundo que provee de calidad a la relación turística”, ya que también han añadido algunos requisitos en esta normativa que incluye la habitabilidad y el confort de la vivienda.