Cae un árbol de grandes dimensiones en Pinares de San Antón: "Parecía una bomba, que la casa se caía"

El árbol caído en Pinares de San Antón.
El árbol caído en Pinares de San Antón. / M. G.

Un pino de grandes dimensiones ha caído este viernes sobre uno de los muros que separa el Castillo de San Antón -uno de los rincones más antiguos de la capital malagueña, propiedad privada desde el siglo XIX- con una vivienda unifamiliar situada en calle Esterlicia. Aunque no hay que lamentar heridos, Maribel Pozo, vecina de la vivienda afectada asegura que el susto no ha sido pequeño: "Parecía una bomba, que mi casa se había caído. Ha sido horrible".

Hacía apenas quince minutos que Maribel (73) y su marido (83) habían estado descargando bolsas de la compra justo en el lugar en el que parte del árbol -de al menos 15 metros- cayó. Afortunadamente, explica que tan solo el vehículo ha sufrido algunos daños. Si bien, lamenta que "llevaba mucho tiempo viendo desde la ventana de mi cocina cómo se iba volcando y no han hecho nada".

Desde el 112 han confirmado que sobre las 16:00 entró una llamada avisando de la caída de un pino de gran tamaño en Pinares de San Antón -en el distrito este de la ciudad-, que habría dañado un muro y cortado la vía. En ese momento, el centro coordinador activó tanto a Policía Local como a Bomberos. Estos últimos han explicado que se ha troceado el árbol y retirado los troncos más gruesos una vez comprobado que no constaban personas heridas.

Maribel denuncia que el pino caído llevaba seco dos años y que desde el Castillo de San Antón se había solicitado al Área de Sostenibilidad Medioambiental del Ayuntamiento de Málaga permiso para cortarlo. "En enero los técnicos vinieron para inspeccionar el pino y valorar la petición. No ha habido respuesta y finalmente se ha terminado cayendo", critica al tiempo que apunta que "no se trata de una situación excepcional en la barriada".

Denuncia que en la zona "hay otros muchos pinos secos con los que tampoco hacen nada". Pide al Ayuntamiento un estudio pormenorizado de los árboles de Pinares de San Antón para podar aquellos necesarios y evitar un mal mayor. "Se dan permisos para cortar los frescos y no los que están secos. Es urgente cuidar los pinares, son el único pulmón de Málaga", ha considerado.

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