Detienen en Cómpeta a siete jóvenes por la muerte de un británico

Veinte días después de la pelea multitudinaria que tuvo lugar en el municipio de Cómpeta en la que murió un británico de 49 años, y dos de sus hijos fueron ingresados en el hospital, el Grupo de Homicidios de la Policía Judicial y agentes de la Guardia Civil de esta localidad detuvieron a siete individuos vinculados con los hechos ocurridos el 5 de junio en el pub La Estrella. Según fuentes del Instituto Armado, los arrestados tienen entre 20 y 22 años, al tiempo que precisaron que entre ellos hay una mujer. Estas mismas fuentes no descartan que en los próximos días haya nuevos arrestos, dado que en los hechos pudieron intervenir más de veinte personas. En el grupo hay también vecinos de Canillas de Albaida y de Árchez. Las detenciones se han producido poco después de las 08:00 en sus propios domicilios. Tras pasar por el cuartel de la Guardia Civil de Cómpeta fueron trasladados hasta la Comandancia en la capital malagueña.

Los hechos tuvieron lugar poco después del cierre de la discoteca, alrededor de las 04:00 de la madrugada, en la Avenida de La Constitución, junto al hotel Balcón de Cómpeta. Los motivos que desencadenaron la pelea se desconocen pero los vecinos aseguran que la muerte del británico se produjo tras caer por una tapia de seis metros. También comentan que pese a enfrentarse a un gran número de atacantes se defendió con soltura "como si supiese artes marciales". Tras la caída, el hombre sufrió un traumatismo craneal y varios hematomas que le ocasionaron la muerte doce días después de la reyerta en el Hospital Carlos Haya de Málaga. Sus hijos recibieron golpes en la nariz y en los brazos.

La detención de estos siete jóvenes ha pasado desapercibida en el municipio. No hubo ninguna concentración de familiares y amigos a las puertas del cuartel de la Guardia Civil. Tampoco quieren hablar demasiado del "tema". Uno de los amigos de los implicados en la pelea recibía con sorpresa la actuación. "Es lo que pasa con las peleas, no se sabe como van a acabar y no traen nada bueno. Si lo tienen que pagar que lo paguen, pero fue un accidente involuntario", comentó este joven, que asegura que "poco faltó" para verse él involucrado. "Suelo ir a ese bar después de cerrar mi restaurante, pero ese día acabé cansado. De estar allí con mis amigos supongo que de alguna forma también habría participado. Aquí nos conocemos todos y son gente normal, estudiantes y currantes, nada bélicos y sin antecedentes", dijo.

El alcalde José Luis Torres (PP) lamentó que estas noticias estén "dañando la imagen" del municipio. "Ha sido un hecho aislado que lamentamos, pero hay que subrayar que somos un pueblo pacífico que lleva cuarenta años conviviendo con extranjeros", aclaró, al tiempo que expuso que existen en la localidad hasta 46 nacionalidades diferentes. En este mismo sentido, se quejaron algunos propietarios de establecimientos de restauración que defendieron la seguridad que existe en la localidad. "En Cómpeta se puede salir por la noche y nunca ha pasado nada. A esas horas, y con alcohol por medio, como en otros tantos pueblos pueden producirse incidentes desagradables", apostilló. El mutismo en el pueblo en torno a estos hechos hizo difícil obtener testimonios para avanzar en la investigación.