Enfermeros del Regional de Málaga advierten que “no serán responsables” de los errores por falta de personal
El hospital afirma que se cumplen las ratios y que hay 181 profesionales más que hace cuatro años
Los trabajadores envían escritos a la gerencia porque “se pone en riesgo” su seguridad y la de los pacientes
Denuncian la falta de unos 300 enfermeros en el Hospital Regional de Málaga
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Málaga/Delimitación de responsabilidad. Así se llama el escrito que algunos enfermeros del Hospital Regional están empezando a remitir a la gerencia para advertirle de que la falta de personal está llegando a límites que consideran peligrosos y que les puede llevar a cometer un error. “En estas condiciones nos es imposible prestar nuestros cuidados con garantías para la seguridad de nuestros pacientes y la nuestra propia”, reza el documento.
El texto ha sido elaborado con el asesoramiento jurídico del Sindicato de Enfermería (Satse) y es un modelo tipo. Señala que “se dan casos de inseguridad personal y profesional” y que “bajo ningún concepto se debe realizar el desarrollo de las funciones profesionales bajo este tipo de presión, lo que deberá ser tenido en cuenta en caso de ocurrir cualquier incidente”.
Satse estima que en el hospital faltan unos 300 enfermeros300 enfermeros. Ello obliga cada vez con más frecuencia a sacar personal de un área para cubrir un hueco en otra. Esta situación tiene dos efectos: por un lado, los que se quedan tienen menos profesionales para atender a los pacientes y por otro, los que salen de su unidad habitual van a otra cuya dinámica, curas, dosis y equipos no dominan.
“¿Qué vamos a esperar?¿Que un día se produzca una desgracia?”, reflexiona el delegado de Satse en el Regional, Ignacio Anguita. Recuerda que hace unos días, un enfermero del quirófano de Tocoginecología fue enviado a otro servicio donde faltaba personal. Pero luego se presentaron dos cesáreas urgentes en el área ginecológica, así que el supervisor tuvo que meterse a la carrera en el quirófano porque no había suficiente personal. “En estas condiciones de trabajo, el paciente está peor atendido y las posibilidades de una negligencia por un error, aumentan”, advierte Anguita.
Por su parte, el hospital precisa que la plantilla de profesionales de Enfermería en el complejo es de 1.899 profesionales en la actualidad, 181 más que en la misma fecha de 2019. “La plantilla de enfermería está adaptada en función de las necesidades asistenciales de cada servicio o unidad y, en los casos en los que hay profesionales que se trasladan de área, siempre se hace adaptando los recursos disponibles y cumpliendo con la ratio”, asegura.
El escenario que describe el sindicato es diferente, por lo que ha elaborado un texto tipo con el asesoramiento jurídico de sus abogados. Satse desconoce la cifra de profesionales que lo han presentado, ya que lo hacen a título personal.
La respuesta de la Dirección de Enfermería al escrito de un trabajador del área de Urgencias de Pediatría que denunció que en su turno había habido menos personal de lo habitual fue que las cargas de trabajo estaban “dentro de unos cánones de calidad y ratios de seguridad”. El problema es que las ratio enfermero/paciente –que varían según las áreas– son recomendaciones, no una obligación. Así que cuando faltan profesionales en un sitio, se sacan de otro donde haya más, aunque al final en ambos destinos la plantilla se quede corta.
Además, en la respuesta al escrito del enfermero, la dirección le recuerda que la Ley 55/2003 “no les reconoce en su articulado el derecho a la delimitación de responsabilidad que pretende” y que ese texto normativo sí permite en su régimen disciplinario “exigir responsabilidades administrativas a los profesionales cuando incurran, por acción o por omisión, en alguna de las conductas tipificadas como faltas disciplinarias, con ocasión del desarrollo de sus funciones”.
Anguita interpreta estos últimos argumentos como “una amenaza velada” hacia los enfermeros que presentan el documento. Por ello, Satse también ha redactado un texto tipo de alegaciones a la respuesta de la dirección en el que cada enfermero expone que “no pretende eximirse de su responsabilidad”, pero sí poner en conocimiento de la gerencia de que “debido a la alta carga de trabajo [...] se pueden ocasionar errores e incidentes de los cuales no se hacen responsables”.
Incluso, el documento de alegaciones recuerda que “la responsabilidad penal actualmente también es imputable a los responsables de la Administración, lo que deberá ser tenido en cuenta de proseguirse con la falta de medidas para un trabajo seguro y en caso de ocurrir algún accidente por los indicados motivos”.
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