Familiares de 'bebés robados' piden un banco de ADN único y gratuito

La única posibilidad fiable de contrastar científicamente si dos personas, aunque no se conozcan de nada, son de una misma familia es mediante una prueba de ADN. Es un aspecto clave en la investigación sobre el supuesto robo de bebés en hospitales de toda España entre los años 50 y 80. Hay dos laboratorios, Genómica y Neodiagnóstica, que han creado un banco de muestras tanto para aquellos que buscan a sus posibles hijos o hermanos como para los individuos que crean haber sido objeto de una adopción ilegal. Sin embargo, según explica Isabel Agüera, presidenta de la Asociación de Bebés Robados de Andalucía (Aberoa), hay dos problemas.

El primero es que al haber dos laboratorios no hay una base de datos común para contrastar los datos. El segundo es que esas pruebas tienen un coste de 120 euros y muchas de estas familias, en su mayoría con escasos recursos económicos, no pueden afrontar ese pago. Familiares que han denunciado el caso de bebés robados exigieron ayer en la puerta de la Ciudad de la Justicia de Málaga que se cree un banco de muestras único y estatal, de forma que el servicio sea gratuito para los afectados. Están recogiendo firmas y las presentarán en Madrid en enero.

Pero ésa no fue la única reivindicación. Los afectados por esta supuesta trama de robos de bebés reclamaron a los jueces de instrucción que no archiven las denuncias procedentes de Fiscalía y que investiguen más. Marina Palomo, abogada de Aberoa, señaló ayer que los jueces están archivando los casos alegando falta de documentación, que no queda acreditada debidamente la perpetración del delito o que éste es el de suposición de parto y que ya ha prescrito. "El secuestro de bebés no prescribe y además queremos que se trate como un delito contra la humanidad y eso tampoco lo hace", explicó Palomo.

En opinión de la letrada, "no hay mayor prueba que la falta de pruebas ya que hablamos de casos que ocurrieron hacen 30 o 40 años y no hay certificados de nacimiento, ni de defunción, muchos médicos ya han muerto y las matronas dicen que no se acuerdan". En Málaga hay una agente de la Policía Nacional que se está encargando de la investigación pero, según Palomo, "se trata de una sola persona y por mucho que quiera hacer está saturada de trabajo". Desde esta asociación se pidió un refuerzo policial para la investigación de forma que puedan llevar más pruebas al juez y éste no archive la causa. La presidenta de Aberoa fue la primera en poner una denuncia en Málaga en junio del año pasado por el supuesto robo de su hermana en el Hospital Civil en 1970. En estos momentos la Fiscalía acumula cerca de un centenar de denuncias y varias de ellas han pasado a los juzgados. Palomo indicó que, por ahora, en Málaga se han decretado cuatro archivos. "Es verdad que no es un número muy alto porque la mayoría de las denuncias siguen en la Fiscalía y no han pasado aún al Juzgado de Instrucción. Nuestro problema es que cuando llegan, dependiendo del juez, la archivan o no", añadió la abogada.

El fiscal jefe, Antonio Morales, ha dado orden de recurrir cualquier archivo e incluso hay jueces que han permitido la exhumación de restos en Estepona o Ronda. No obstante, Morales se jubila dentro de dos semanas y no se sabe aún quién le sustituirá en el cargo y si pondrá el mismo empeño en apoyar estas investigaciones.