Formador de formadores, una profesión con presente y futuro

Los avances tecnológicos, la globalización y las últimas crisis económicas han cambiado las ofertas de formación tradicionales y al propio mercado laboral. Se han creado nuevas salidas profesionales y una de las más demandadas es la de formador de formadores. Una nueva oportunidad de trabajo adaptada a la actualidad que aporta beneficios en diferentes aspectos.

¿Cuál es el papel del formador de formadores?

El formador de formadores se encarga de preparar a sus alumnos para que puedan desarrollar una carrera docente. Se podría resumir en que son profesores que preparan a futuros maestros. Este tipo de profesional es un técnico que planifica, evalúa y desarrolla sus sesiones para preparar a nuevos profesores.

¿Qué capacidades tiene un formador de formadores?

El formador de formadores tiene que conocer a la perfección la materia que imparte. Normalmente estas formaciones están destinadas a un área concreta y la persona que las imparte tiene que ser una experta. Un ejemplo muy claro se da en el ámbito de los idiomas. Existen un gran número de formador de formadores en inglés y español, estos docentes tienen que dominar ambos idiomas y haberlos impartido anteriormente para transmitir todos sus conocimientos.

La labor de estos profesionales se resume en enseñar y esta es una capacidad que debe tener todo formador de formadores. Saber transmitir los conocimientos y captar la atención de las personas que quieren recibirlos es esencial para realizar una enseñanza de calidad. Otra aptitud importante es ser organizado. Una clase es más que hablar sobre un tema concreto, debe tener una estructura en la que se impartan conocimientos teóricos, se aporten ejemplos y se realicen ejercicios prácticos.

El autoaprendizaje es otra de las capacidades que se esperan en el formador de formadores. Además, este aspecto recae en su beneficio personal porque tiene la oportunidad de mejorar y aumentar sus conocimientos en cada sesión y esta mejora puede transmitirla a los futuros alumnos.

La comunicación es fundamental en la enseñanza y este aspecto va más allá de explicar una lección con palabras. Los gestos y las expresiones también comunican y el buen docente sabe emplear estos elementos para llegar a su alumnado. La capacidad de comunicación es una habilidad personal que se puede desarrollar con la práctica y si el formador de formadores la transmite a sus alumnos estará creando profesionales potencialmente preparados.

Además de esto, también son importantes habilidades interpersonales como la escucha activa, la empatía o el liderazgo. Todo esto ayudará al formador a saber si sus lecciones siguen el camino correcto y si los futuros formadores están adquiriendo los conocimientos que necesitan para desarrollar su actividad.

Futuro en el sector online

La transmisión de conocimientos y la enseñanza son disciplinas que sobreviven a cualquier circunstancia. Ser formador de formadores es una profesión que todavía tiene margen de crecimiento. Además, este tipo de docencia se adapta a la perfección al entorno online. Ya no es necesario estar presente en un aula con el profesor y a través de una pantalla se pueden desarrollar y transmitir todas las habilidades de un formador de formadores.