Fotos: Los estragos del barro en coches, calles y edificios de Málaga
Por segundo día consecutivo, la calima pinta de ocre los cielos de Málaga por la presencia de partículas del desierto del Sáhara que ya cubren los edificios, aceras y coches. La ciudad despierta así bajo un notable manto de arenilla, que desde ayer se viene depositando sobre todo tipo de superficies. La masa de polvo, con depósitos de barro, al igual que en la jornada de anterior, viene acompañada de precipitaciones, que, de nuevo, ha dejado grandes cantidades de agua en casi toda la provincia, aún en alerta naranja.