Del García Lorca al Buesa Arena
20 años de 'Málaga Hoy' | Historias de la Redacción
Seguramente aquella crónica no fue mi mejor pieza, pero para mí fue la más importante
Los ‘coloraos’ siempre ganan
De grietas, túneles y asustaviejas
IMAGINEN a un chaval que se aburre del fútbol y empieza a jugar al baloncesto a los diez años porque algunos de sus amigos del cole están apuntados. Al chico le gusta ese nuevo deporte y tiene la suerte de que el extinto Caja de Ronda inicia su proyecto de cantera en el patio de su colegio. Está en uno de los dos mejores equipos de Málaga. El otro es el Maristas. Nunca olvidará esas mañanas de sábado en el patio del García Lorca ni los nervios de la noche anterior. Su pasión por el baloncesto fue creciendo. Veía por televisión al Madrid de Fernando Martín, al CAI de los hermanos Arcega, al Joventut de Villacampa y Montero; al Barcelona de Epi y Norris. Los fines de semana iba a Ciudad Jardín a ver los partidos del Caja de Ronda, entonces en Primera B. Vivió el ascenso a la ACB, la forja de aquel Caja de Pesquera que comenzó a poner el nombre de Málaga en el mapa del baloncesto español y europeo, el milagro de aquel ya Unicaja del no triple de Ansley, la final de la Korac con el Limoges y el posterior título ante el Hemofarm. Fue así testigo de los primeros logros del baloncesto malagueño. Él soñaba con jugar ahí pero no lo logró.
Estudió Periodismo porque, si no podía jugar profesionalmente, al menos podría intentar escribir sobre su deporte favorito. Imaginen que lo logra. Nace Málaga Hoy en 2004 y él forma parte de la redacción de deportes, la mejor redacción de Deportes en aquel momento (créanme que lo era). Ve cumplido un sueño cuando en la Copa de Zaragoza de 2005 tiene que escribir sobre el primer título nacional de su equipo. Se emociona en la previa de la final y disfruta de aquel regalo que los Garbajosa, Herrmann y Berni Rodríguez le ofrecen. Se cuadraba el círculo. Del patio del García Lorca al Príncipe Felipe de Zaragoza. Pero la vida fue aún más generosa y le tenía reservado otro regalo para un año después.
Vitoria, 21 de junio de 2006. Es el titular de la pieza que escribí para acompañar la crónica del maestro José Manuel Olías. La del título de Liga del Unicaja. Aún no sé cómo pude escribirla. Bajamos al vestuario del Buesa Arena de Vitoria y nos unimos a la celebración. Mojados, felices, en shock, fui a la sala de prensa a recoger las impresiones de los protagonistas y a escribir mi pieza. Recuerdo decirle a un compañero: “¿Y ahora, qué escribo?”. Seguramente no fue mi mejor pieza, pero para mí fue la más importante. Después, hice el desplazamiento de vuelta al hotel en el mismo vehículo que Sergio Scariolo junto a algunos compañeros. Recuerdo las palabras del entrenador: “Esto es la hostia, campeones de Liga y encima nos aseguramos el trienio de la Euroliga”. Gracias a Málaga Hoy por permitirme contarlo. Ah, y ¡muchas felicidades!
También te puede interesar
Lo último
Tribuna Económica
Carmen Pérez
Un bitcoin institucionalizado
El parqué
Álvaro Romero
Tono alcista
El mundo de ayer
Rafael Castaño
Tener un alma
Editorial
Nuevo gobierno europeo