El Hospital Pascual de Málaga se destinará sobre todo a pacientes de media y larga estancia

Málaga/El Pascual sumará unas 200 camas a la sanidad pública mientras se construye el tercer hospital de la capital. Y aunque se prevé que sirva para las más variadas patologías y para derivaciones desde todos los centros sanitarios de la provincia, se perfila con una orientación sociosanitaria, de paliativos y pacientes de media y larga estancia. Así, otros hospitales como el Regional, el Clínico, el Costa del Sol o los comarcales podrán centrarse más en los enfermos agudos.

Al menos así lo avanzó el delegado de Salud, Carlos Bautista, que no dio más detalles porque aclaró que el plan funcional del centro aún se está definiendo. Pero aclaró que ese diseño tiene en cuenta el doble circuito Covid-no Covid impuesto por la pandemia.

Aunque la Junta anunció que este hospital se abriría como público –no está clara si la figura sería en cesión o alquiler por cinco años– en los primeros seis meses de 2023, luego los representantes autonómicos han retrasado su reapertura para el segundo semestre.

El Hospital Pascual de Málaga cerró en el verano de 2018. Año y medio después, la propiedad insinuó que preparaba su reapertura pero, finalmente, no se formalizó. Durante la pandemia y a pesar de que el centro de la calle Victoria contaba con 200 camas y equipamiento, el SAS optó por montar el hospital de campaña en Carranque. Eran los tiempos en que la sanidad pública malagueña, como la del resto de España, estaba desbordada. Pero finalmente las instalaciones de Carranque nunca se utilizaron. Tampoco las del Hospital Pascual.

Entonces, las relaciones entre el Ejecutivo autonómico y la empresa sanitaria no atravesaban su mejor momento. Durante la etapa socialista en la Junta, la Administración andaluza mantuvo un largo litigio con Pascual que reclamó un deuda de más de 257 millones de euros por los servicios prestados. Durante décadas, este hospital privado fue una pieza clave en los conciertos del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Finalmente, ya en la etapa del PP, en diciembre pasado, el Consejo de Gobierno aprobó un decreto por el que se autorizó un acuerdo para abonar más de 121 millones de euros a la entidad mercantil José Manuel Pascual SA y cerrar los litigios pendientes.

Según Bautista, la “abultada factura” se saldó tras una negociación muy buena en la que “todos hemos ganado” porque la empresa ha cobrado los servicios prestados y el SAS “suma un hospital”. Desde la Consejería de Salud siempre se ha explicado el proyecto de reapertura como una “ampliación del Regional, no un traslado” y una “solución inmediata” mientras se construye el tercer hospital.

Por su parte, UGT ya reclamó en octubre pasado que se contraten “entre 700 y 800 profesionales” para la reapertura de este centro como hospital público.