El juez no aprecia indicios sólidos para imputar homicidio en la muerte de la mujer de Humilladero

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Antequera, en funciones de guardia, decretó la libertad para el detenido en relación con la muerte de una mujer en Humilladero este pasado jueves en el hospital tras recibir un fuerte golpe en la cabeza. El caso, un día antes, se había confirmado como violencia de género, pero la puesta en libertad del arrestado añade ahora dudas al suceso.

El hombre, ex marido de la víctima, tendrá que comparecer en el Juzgado siempre que se le requiera, según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, que precisa que el detenido tiene condición de investigado y a lo largo de la Instrucción se determinará el delito, de lesiones u homicidio.

Ante la duda de si se está ante un delito de lesiones o de homicidio, ya que el juez no ha visto pruebas concluyentes para atribuirle el segundo, deja al detenido en libertad con la obligación de comparecer. Pese a que la mujer narró antes de morir que el agresor fue su pareja, el magistrado no ha apreciado a la vista de las pruebas reunidas hasta ahora la voluntariedad de la muerte por parte del principal sospechoso y ha decidido dejarle en libertad.

Los hechos ocurrieron este pasado jueves. Los servicios de emergencias atendieron de madrugada a la víctima, una mujer de 54 años y vecina de Humilladero, en plena calle del municipio. Presentaba un fuerte golpe en la cabeza y bajo nivel de consciencia. Al parecer, fue la propia víctima la que confirmó que era su cónyuge quien le habría ocasionado las lesiones, por lo que se activó el protocolo contra la violencia de género. La Guardia Civil lo detuvo en el municipio de Alameda, a unos 15 kilómetros de Humilladero.

La víctima fue atendida por efectivos sanitarios, que la trasladaron al Hospital de Antequera, en el que ingresó con un fuerte traumatismo craneoencefálico, y fue evacuada, posteriormente, en helicóptero al Hospital Regional de la capital, donde, finalmente, murió.

Ambos estaban en el sistema VioGen por una denuncia de ella a su marido por malos tratos en 2020 pero no tenía medidas judiciales ni de alejamiento y el caso estaba inactivo en la actualidad. A ello se sumarían otros altercados previos a su muerte.

Un amplio despliegue de agentes estableció un cordón policial y cortó una calle mientras se realizaba la reconstrucción del crimen, donde varios guardias civiles escoltaron en todo momento al presunto autor, que fue conducido desde los calabozos de Antequera a Humilladero.