El alcalde de Málaga sobre el concierto de rock de La Invisible: "El edificio no tiene seguridad plena"

Málaga/Al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, no le ha gustado conocer que en La Invisible celebran conciertos a pesar de carecer de licencia para ello y seguir con el edificio apuntalado. "Mi opinión es negativa sobre el tema", ha respondido a una pregunta acerca de los eventos en el inmueble. "El edificio ahora mismo no tiene seguridad plena y total", ha continuado el regidor.

"Ya hemos advertido que el espacio no tiene las condiciones adecuadas para desarrollar esas actividades", ha incidido De la Torre, a la vez que recordaba que en Halloween "hicimos una advertencia sobre el particular", cuando levantaron acta por una fiesta que pretendían organizar en el interior y cercaron el edificio para impedir el acceso. El regidor ha incidido en que "si tenemos noticia trataremos de actuar de manera preventiva, como es natural".

Sobre la rehabilitación del edificio, necesaria para devolver la seguridad al inmueble, ha añadido que en el Consistorio "tenemos la voluntad de que el edificio tenga esa seguridad, de ahí la rehabilitación", a lo que ha añadido que la pretensión municipal pasa también porque "esté abierto a más usos, que ahora no lo tiene", ahondando en la idea de que La Invisible comparta el espacio con otra entidad cultural.

"Es tan razonable como buscar la seguridad donde no la tiene, como buscar un uso para sacarle el máximo partido a un bien público, hay otras instituciones interesadas de un nivel de calidad interesante, como la Academia de la Ciencia o la Casa Amarilla", ha ahondado De la Torre, mientras avisaba de la complejidad del tema.

Respecto a la negativa que viene profesando La Invisible a compartir el edificio, bajo el pretexto de que el edificio es parte del proyecto cultural, el alcalde defiende que compartir el inmueble "es de sentido común y uno confía en que las cosas que tienen sentido común y son lógicas acaben siendo aceptadas por todos".

No ha marcado ningún plazo para retomar el diálogo con la Fundación de los Comunes, órgano de representación de La Invisible, apuntando que "hay muchas prioridades en la ciudad estamos en otras tareas, pero se irá haciendo". A lo que ha sumado que "aún no se han agotado todas las vías para que se acepte ese sentido común.

El Ayuntamiento licitó en agosto de este año la redacción del Proyecto Básico y de Ejecución, del Estudio de Seguridad y Salud y la Dirección de Obra de los trabajos para reformar el inmueble situado en calle Nosquera 9 y 11, de titularidad municipal y que tuvo un coste de 4 millones de euros para el Consistorio.

El inmueble municipal, cuenta con un nivel de protección arquitectónica Grado II, según el catálogo de edificios protegidos del Pepri Centro, y está calificado como equipamiento de acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbana vigente.

La Invisible está en estos momentos en una situación de cesión en precario del edificio, con dos procedimientos judiciales pendientes para determinar su futuro. El edificio, lleva okupado desde 2007 por el colectivo de La Invisible para desarrollar actividades culturales y sociales. El pasado mes de mayo, el juez denegó al Ayuntamiento de Málaga la autorización para desalojar La Casa Invisible. Con esta decisión se desestimaba la orden de entrada que el consistorio solicitó por segunda vez en octubre de 2022, y el Juzgado recordaba que ya existe un procedimiento judicial principal que solo está a la espera de sentencia.

Este procedimiento se inició en 2018, cuando La Casa Invisible recurrió la denegación de la cesión del espacio y el desalojo acordado por el Ayuntamiento en ese momento. El Juzgado señaló que no es posible llevar a cabo el desalojo del inmueble sin vulnerar el derecho a la tutela judicial efectiva, lo que obliga a esperar al dictado de la sentencia. De esta forma se trataba de evitar que una futura sentencia favorable a La Casa Invisible no pudiera llevarse a cabo si previamente se ha desalojado el edificio.

A comienzos de año parecía que Ayuntamiento e Invisible acercaban posturas en una negociación en la que incluso llegaron a exponer que el Ayuntamiento estudiaría el plan de rehabilitación por fases que propone La Invisible para comprobar su viabilidad. Sin embargo, no se produjeron más movimientos en este sentido y, tras las elecciones, el Ayuntamiento licitó los estudios para rehabilitar el edificio mediante el IMV.