Málaga, la cuarta provincia española a la que llegan más turistas de lujo

Las habitaciones de cinco estrellas en la capital se han multiplicado por cuatro desde 2016 y actualmente hay unas 953

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Un par de turistas con su equipaje por el centro de Málaga.
Un par de turistas con su equipaje por el centro de Málaga. / Javier Albiñana
Paula Tejada

30 de junio 2023 - 16:29

Málaga/El vivir nuevas experiencias únicas, personalizadas y sostenibles es lo que el turismo de alta gama busca al viajar a otros países. En España este turista genera mucha riqueza y hasta ahora ha estado muy presente en Madrid y Barcelona, pero está empezando a moverse hacia otras regiones como Andalucía, Baleares o Canarias. En Málaga en concreto, según los datos aportados por McKinsey and Company en el Fortuny Talk organizado por Círculo Fortuny, en 2016 había 212 plazas hoteleras de cinco estrellas y en enero de 2023 ya había subido hasta las 953.

El incremento del turismo de alta gama tanto a nivel provincial como nacional se debe, según McKinsey and Company, al atractivo español que consiste en el clima, a la oferta cultural, la gastronomía, las conexiones aéreas y la oferta cultural. A día de hoy, Málaga es considerada un destino turístico de lujo post-pandemia, sobre todo por el mercado británico que más viajó a la Costa del Sol en 2022, el 16% total de los turistas.

El vuelo directo de Nueva York ha abierto una puerta a los turistas estadounidenses y esta conexión es un “factor fundamental de atracción del turista de alta gama”, según el informe de McKinsey. Además, esto junto con el incremento de la oferta cultural de los últimos años en Málaga ha hecho que muchas cadenas hoteleras estén interesadas en crear habitaciones de cinco estrellas.

Esta subida hasta las 953 plazas hoteleras de este tipo significa que este tipo de habitaciones se ha multiplicado por 4,5 desde 2016. En esta línea, al observar la situación actual de Málaga, prevén que en los próximos años se sumarán más plazas de esta categoría.

Apostar por el legado patrimonial, cultural y artístico, tener una oferta de ocio en diferentes formas, contar con una gran oferta de hoteles y hostelería, la posibilidad de hacer compras de lujo y la conectividad de los vuelos son claves para crear un destino de lujo. Málaga, en este sentido, ya es la cuarta provincia en España en atraer más turistas de alta gama, solo por detrás de Barcelona, Madrid y Mallorca. Además, también es la cuarta provincia española en apertura de hoteles y alojamientos turísticos para estos viajeros en España en el último año, de acuerdo con los datos de McKinsey.

Málaga ya estaba en el mapa del turista de lujo gracias a Marbella. Ésta lleva siendo un “icono de lujo desde hace décadas”, según Xandra Falcó, presidenta del Círculo Fortuny. Además, está en la octava posición como destino de playa de lujo.

La situación actual de Málaga y cómo está avanzando para crecer en este segmento turístico ha sido uno de los temas debatidos en una mesa redonda moderada por Pablo del Pozo, CEO y presidente de Nuba, donde han participado Constantino Gómez, socio de Arcano Partners; Juan Núñez Insausti, CEO de Puerto Banús; Rene Zimmer, managing director de Finca Cortesin Hotels & Resorts; y Jacobo Cestino, CEO de Zagaleta.

Málaga "necesita liberar suelo" para seguir creciendo como destino de lujo

En esta línea, Cestino ha asegurado que la Costa del Sol es “muy heterogénea” y la zona que más se está transformando es Málaga capital y “va por buen camino para que vengan marcas de lujo”. Asimismo, también ha remarcado que la ciudad “no debe tener prisa” por llegar al mismo punto en el que se encuentra Marbella, puesto que para llegar ahí “deben pasar muchas cosas”. Entre ella, ha destacado que se necesita un “beach club para que vengan marcas de lujo” y para ello "necesita liberar suelo". En este punto ha coincidido con Cestino Constantito Gómez, que ha remarcado que por parte de las compañías que venden productos o servicios de lujo “va a seguir habiendo interés sobre todo en Málaga”.

Por su parte, Juan Núñez Insausti ha señalado que aproximadamente el 72% de los turistas que llegan a Puerto Banús son extranjeros, se quedan unos cinco días y gastan diariamente de media en torno a 500 euros. Para seguir creciendo su objetivo ahora es bajar el volumen de turistas para mejorar o ganar en calidad. Además, también ha añadido que Puerto Banús es “una demostración de que un puerto deportivo puede llegar a ser un rol muy importante en el mundo del turismo de alto impacto”.

El principal problema del sector, según Rene Zimmer, es el talento y “no solo su retención, sino encontrar nuevo talento”. Actualmente, el encontrar talento para Zimmer es ·muy importante porque sin ese talento no llegamos a la sofisticación que queremos llegar”.

Por su parte, Jacobo Florido, concejal de Turismo del Ayuntamiento de Málaga, ha ratificado que la capital tiene “una falta de suelo importante que hace que grandes marcas hoteleras no puedan venir aquí”, pero considera que está creciendo “a buen ritmo”. En esta línea, ha señalado que “tenemos un buen clima, somos un ejemplo de cultura, en gastronomía estamos mejorando mucho, en conexiones somos un referente y algo en lo que estamos trabajando es en la oferta comercial”. Por ello, desde el equipo de gobierno, Florido ha incidido en que trabajan “en esa línea”.

España recibió a seis millones de viajeros de lujo en 2022

El turismo de alta gama ha crecido en Málaga, pero a nivel nacional está en pleno auge, según McKinsey. Los datos que han aportado señalan que el número de viajeros creció un 20% entre 2015 y 2022, hasta alcanzar los 6 millones de turistas de alto impacto el año pasado. El principal motivo de este crecimiento se debe a que han aumentado los hoteles de lujo en España entre 2015 y 2022 un 27”%. Además, el análisis de McKinsey también destaca que los turistas de alta gama aportan una riqueza a la economía nacional que el turista clásico no da. De igual forma, el “lujo silencioso” ha llegado a España. Este es un un turismo de alta gama no ostentoso que ha hecho que las reservas en alojamientos independientes sin marca de valor cuyo coste supera los 1.000 euros por noche crecieron en España un 60%, según Airbnb. Esta alternativa ha contribuido a generar riqueza en destinos únicos, al estar deslocalizados de los centros urbanos y muy vinculados a la naturaleza.

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