Marcarle un gol al terrorismo

Imagínense un partido de fútbol sin zancadillas maliciosas, ni gradas beligerantes ni protestas sobre los criterios arbitrales. Ángel Jiménez creyó en ese proyecto y luchó por que se hiciera realidad.

Bajo el nombre de Deporte y convivencia(www.deporteyconvivencia.blogspot.com), este profesor de Lengua española e Historia de la Religión decidió mediante partidos de fútbol sala, luchar por una buena causa.

Hace unos meses el premio era combatir por la tolerancia ente religiones por lo que los equipos estaban formados por hombres y mujeres de once credos distintos. En la jornada de ayer la finalidad no era otra que apoyar a las víctimas del terrorismo. "El deporte puede ser un bandera para llevar los valores , cuando no se convierte en un negocio. Además con la víctimas hay que estar siempre".

"Mi idea es organizar estos partidos en el País Vasco. Se qué es difícil y complicado, pero soy un idealista y voy a luchar para que eso sea posible", apuntó Ángel durante el descanso de uno de los partidos. "Lo mejor de estas iniciativas son las ideas y la gente, sobre todo la gente. Se llevan fenomenal entre ellos y no hay ningún tipo de problema".

Eduardo Montoro es técnico de la fundación Asís (Asociación Solidaria de Integración Social). Para esta edición, Eduardo quiso convocar a personas de su fundación para que formaran parte de esta iniciativa. La aportación de esta fundación fue de seis senegaleses y cinco marroquíes. "Lo que hay que resaltar de estos actos es el corte social. Para nuestra asociación es muy importante porque nosotros trabajamos con personas que se encuentran en una minoría social y con estas actividades se implican en nuestra sociedad", explicó Montoro.

En un momento de descanso dentro del partido, un portavoz de los participantes leyó un manifiesto en el que se rechazaba categóricamente la violencia como instrumento para conseguir un fin. Además, quisieron mostrar su apoyo a todas las víctimas del terrorismo rechazando "la venganza y la alteración de los principios que deben regir en un estado de derecho. Seguiremos defendiendo la idea de convivencia pacífica que asumieron las víctimas".

Sobre el papel, de los cuatro equipos formados, el Blanco se alzó con la victoria, aunque eso era lo de menos. En el momento del pitido final, los participantes, mediante un manifiesto, reconocieron su alegría por su participación en este encuentro solidario.