El Materno congelará tejido ovárico para que niñas con cáncer puedan ser madres

El proyecto lo desarrolla el hospital con el Banco de Tejidos

Málaga pilotará la iniciativa para toda Andalucía

Es una línea de investigación que se autoriza como ensayo clínico

Una trabajadora del Centro de Transfusión, Tejidos y Células en los tanques en los que se almacena material biológico.
Una trabajadora del Centro de Transfusión, Tejidos y Células en los tanques en los que se almacena material biológico. / Javier Albiñana
Leonor García

30 de junio 2018 - 01:38

Málaga/Málaga da un paso innovador en la sanidad pública: congelará tejido ovárico para que niñas con cáncer y a las que ciertos tratamientos oncológicos destruyen su capacidad reproductiva puedan ser madres en el futuro. El Banco de Tejidos de Málaga pilotará el proyecto para toda Andalucía. La previsión es que antes de fin de año empiece a beneficiar a las primeras pacientes. "Es una línea de investigación, un ensayo clínico", aclara el director del Centro de Transfusión, Tejidos y Células (CTTC), Isidro Prat. Fue autorizado el martes pasado por el Consejo Interterritorial de Salud (CIS) tras ocho años de trabajo y colaboración entre los profesionales del Banco de Tejidos y de los servicios de Ginecología y Cirugía Pediátrica del Materno.

El hospital ya ofrece la posibilidad de congelar los óvulos a las mujeres que se van a someter a tratamientos agresivos que pueden acabar con su fertilidad para que tengan hijos en el futuro si lo desean. El problema lo presentaban las niñas prepúberes, que aún no tenían la regla, y en las que esta opción no era posible.

El proyecto obtiene la luz verde del Consejo Interterritorial de Salud tras ocho años de trabajo

El proyecto consiste en extirpar un trocito de corteza ovárica a la menor antes de que reciba los tratamientos oncológicos. Luego ese fragmento biológico se congelará en el Banco de Tejidos -situado junto al Hospital Civil- hasta que la paciente, en el futuro lo demande para poder tener un hijo. Entonces, los profesionales del Banco lo descongelarán y los cirujanos del Materno se lo implantarán, con lo que recuperará su capacidad reproductiva.

La responsable técnica del Banco de Tejidos, la hematóloga Maricarmen Hernández, explica que sobre todo es una técnica que se utiliza para cánceres del sistema linfático y de hueso. En leucemias aún no se prevé su uso porque al ser un tejido lo que se extrae y luego se repone, existen dudas sobre si ese fragmento pueda tener células cancerígenas que reintroduzcan la enfermedad tras la curación.

La autorización del CIS comprende tanto al Banco de Tejidos como al Materno, ya que los dos centros son imprescindibles para el proyecto se lleve a cabo. El hospital hará la operación tanto para extraer como para colocar el trozo de corteza ovárica y el Banco congelará y almacenará ese material biológico. La iniciativa ya ha superado los trámites del Comité de Ética y de la Coordinación de Trasplantes. Pero ahora ambos centros deben pasar los últimos controles de un comité de expertos para que empiecen a hacerse los primeros casos. "Es un proyecto para niñas prepúberes, sobre todo pacientes oncológicas en las que los tratamientos comprometen su fertilidad", insiste la hematóloga. Y es sólo para uso propio de la niña en el futuro.

La técnica ya se realiza en Valencia y Barcelona. En Andalucía, Málaga no sólo será pionera sino que pilotará el ensayo clínico para toda la comunidad autónoma. En mujeres adultas, este avance ya que aplica en otros hospitales de España en caso de que la paciente, por la gravedad de su enfermedad oncológica, no pueda esperar a una estimulación ovárica de varias semanas para extraerle óvulos. En estos casos, también se le extirpa un trozo de la corteza del ovario para su congelación (criopreservación). A veces, también se recurre a esta técnica para utilizar ese fragmento ovárico a fin de regular la función hormonal de la mujer en lugar de utilizar tratamientos sustitutorios; es decir, como si fuera un apósito biológico de la propia paciente.

Varones y mujeres puden preservar semen y óvulos

Los varones adultos que por tratamientos agresivos puedan perder su fertilidad también pueden congelar su esperma para ser padres en el futuro. Esa posibilidad existe desde 1995. La criopreservación se realiza en el Centro de Transfusión, Tejidos y Células -como se denomina ahora el antiguo Centro Regional de Transfusión Sanguínea-. La conservación se hace en tanques de nitrógeno líquido, a 196 grados bajo cero. El semen sólo puede ser utilizado por el paciente para sí mismo. Por su parte, a las mujeres adultas que van a someterse a tratamientos que pongan en riesgo su capacidad de tener hijos, la Unidad de Reproducción del Materno les ofrece desde hace varios años la posibilidad de congelar sus óvulos (vitrificación) para que sean madres en el futuro si lo desean.

stats