Muere un pasajero en un vuelo que partió de Málaga y estaba previsto que llegara a Manchester

Un avión de Ryanair despegando. / Manuel Aranda

Muere un pasajero a bordo de un avión, cuando se encontraba a más de 11.000 kilómetros de altura, que partió desde Málaga y estaba previsto que aterrizara en Manchester. El piloto finalmente tuvo que desviarse del recorrido y realizar un aterrizaje de emergencia en la ciudad francesa de Burdeos.

Los hechos tuvieron lugar el pasado 7 de enero cuando un viajero falleció de forma repentina durante un vuelo, operado por la compañía Ryanair. La tripulación de la aerolínea tomó la determinación de desviarse del destino y llevar a cabo un aterrizaje de emergencia en Francia debido a la gravedad del asunto. Aunque solicitaron asistencia médica y a la llegada del avión al aeropuerto ya se encontraban allí los sanitarios, no pudieron hacer nada por salvar la vida del hombre -de nacionalidad británica-, que terminó falleciendo, tal y como ha adelantado el periódico Mirror.

El diario también asegura que la compañía aérea ofreció al resto de pasajeros alojamiento esa noche y, a la mañana siguiente, el personal del aeropuerto estuvo pendiente de registrar a todos los viajeros del vuelo de forma gratuita, así como emitir sus tarjetas de embarque para que partieran en otro vuelo hacia Manchester. de pasajeros. Desde la Oficina de Asuntos Exteriores, Commonwealth y Desarrollo (FCDO) ha confirmado que el pasajero que murió era un ciudadano británico y que su familia está recibiendo apoyo.

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