El Obispado achaca a la burocracia el retraso en la reparación de la cubierta de la Catedral de Málaga

Málaga/El Obispado de Málaga ha presentado las cuentas correspondientes al año 2020. La situación en la que se encuentra la Catedral ha estado presente entre los números que componen el grueso del balance. En este sentido, el ecónomo diocesano, Rafael Carmona, ha achacado los retrasos en la rehabilitación de la cubierta a la burocracia, ya que todavía no disponen de los permisos correspondientes de la consejería de Cultura.

No es el único inmueble que se ve afectado por esta cuestión. La restauración de la iglesia del Sagrario, cuya inversión hasta el momento ronda los 900.000 euros según ha explicado, se suma a la de la cripta del Santuario de la Victoria, con un coste (únicamente en catas) de 20.000 euros. Tres grandes intervenciones que se encuentran a la espera de los permisos competentes para poder acometer la actuación.

Cabe reseñar que la partida destinada a obras y conservación de inmuebles durante el año 2020 fue de 5.6 millones de euros. "¿De donde se va a sacar el dinero? De los bancos (...). Ya va siendo hora de que nuestra cubierta tenga la dignidad que se merece", ha subrayado, insistiendo en que desde el Obispado van a llamar a las puertas de todas las administraciones para poder desarrollar estas labores.

Estas tareas de restauración y conservación de templos antiguos son la principal razón de la deuda de 30 millones que tiene la Diócesis de Málaga. Préstamos a largo plazo (20-25 años) para que las parroquias puedan hacer frente a una parte de ese gasto pero sin comprometer sus cuentas.

Debido a la crisis económica, derivada del coronavirus, la Iglesia de Málaga tuvo que solicitar el año pasado un préstamo de un millón euros, a devolver en 5 años. Junto a los 700.000 euros (procedentes de aquellas parroquias e instituciones con más superávit, así como de la donación de la paga extraordinaria de los sacerdotes), las cuentas de 2020 contienen una partida de 1.7 millones correspondientes a la "necesidad de financiación".

En total, el presupuesto del 2020 pasado fue de 18.66.359 euros, casi tres millones menos que en 2019, cuando se alcanzó la cifra de 21.6 millones. En este sentido, hay que indicar que el capítulo de mayor partida procede de las aportaciones de los fieles a través de la declaración de la renta (que ha subido un 9%), y aportaciones directas o a través de las parroquias (unos 11 millones entre los tres conceptos). De igual modo, destaca un ingreso de 2.7 millones procedente de patrimonio y actividades, además del ya mencionado préstamo y de las ganancias obtenidas a través de otras fuentes.

"La gente ha visto la labor callada de la Iglesia y que los necesitados llaman a la puerta de las parroquias, y no de otra casa", ha señalado Carmona, como explicación a ese aumento de contribuyentes que han marcado la X de la Iglesia en la declaración de la renta. Como curiosidad, cabe reseñar que las donaciones digitales pasaron de 9.000 euros a 114.620 durante el año 2020, gracias a la plataforma donoamiiglesia.es.

El empleo de los recursos se ha distribuido de la siguiente manera: retribución de los 315 sacerdotes y del personal seglar (7.3 millones), conservación de edificios y funcionamiento (5 millones), actividades pastorales y asistenciales (3.7 millones) y gastos extraordinarios (2.7 millones): "No hemos hecho un erte, ni hemos despedido a nadie. Se ha hecho un esfuerzo mayor para salir adelante", ha señalado Carmona.

En lo que respecta a las actividades celebrativas, las confirmaciones y los matrimonios (11.576 y 1.113 respectivamente) mantuvieron unos niveles similares a los de 2019. Sin embargo, sí que se produjo un descenso en los bautizos (de 6.492 a 4.921) y en las comunicaciones, que pasaron de 7.092 en 2019 a 5.740. Una bajada que, desde el Obispado vinculan al descenso en la natalidad y a los cierres a causa del confinamiento.

La labor pastoral y evangelizadora es desarrollada mediante el trabajo de los 315 sacerdotes, 16 diáconos permanentes, 200 monjas de clausura, 5.137 catequistas y voluntarios parroquiales, 115 misioneros, 800 religiosos y 17 seminaristas (de cuales, 5 serán ordenados sacerdotes en el próximo curso). En lo que a inmuebles se respeta, 252 parroquias y 18 monasterios conforman el núcleo de las propiedades. También cuenta con 69 bienes inmuebles de interés cultural y 16 proyectos de construcción y rehabilitación.

Dentro de la actividad educativa desarrollada por la Iglesia de Málaga, se desprenden algunas cifras relevantes: existen 35 centros católicos de la Fundación Victoria, con más de 8.000 alumnos, 589 docentes y 226 trabajadores. Por otro lado, cerca de 31.000 alumnos estudian en algunas de las escuelas católicas integradas en la Diócesis de Málaga, en las que trabajan 2.660 personas.

Sin contar la labor que desarrolla Cáritas, en cuanto al trabajo caritativo y asistencial, hay que reseñar la atención a casi 44.000 personas que durante el año 2020 fueron atendidas en más de 200 centros.