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Carmen Pérez
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Entrevista | Pere Navarro. Director General de la DGT
El desparpajo y la claridad en el discurso de Pere Navarro es de sobra conocido y ayer se volvió a comprobar. El director general de la Dirección General de Tráfico inauguró en Málaga el V Encuentro de Ciudades para la Seguridad Vial y la Movilidad Sostenible y concedió una entrevista a este diario.
–Dice usted que la movilidad es la “revolución silenciosa”.
–Todo está cambiando y la movilidad también. Es una revolución silenciosa en la que aparecen ordenanzas en Bilbao, Barcelona, Valencia, Madrid, Zaragoza o Málaga en las que se empiezan a asumir riesgos y a dibujar un nuevo modelo para tener una ciudad más humana y sostenible. El futuro de las ciudades se juega en el terreno de la movilidad. Las que no lo resuelvan bien van a quedar atrapadas en la congestión, el ruido, la polución y los accidentes. Las que sí lo hagan bien atraerán talento y serán competitivas. El transporte urbano, las bicicletas, andar... La motocicleta tendrá un protagonismo creciente porque se van a reducir los coches. Se va a entrar también cada vez más en el modelo de transporte compartido porque desplazar 1.000 kilos para mover a una persona es ineficiente.
–¿Cómo van a regular los patinetes eléctricos?
–La DGT va a entrar porque nos lo han pedido los ayuntamientos. Hasta ahora no existía como vehículo y hay que colocarlo en el reglamento de vehículos y se le aplicará toda la legislación de prohibido usarlo con alcohol, etcétera. Con el patinete se han inflado las expectativas, parecía que todo el mundo íbamos a ir en uno pero se está resituando. Es un modo más que tendrá un pequeño protagonismo en los desplazamientos urbanos como complemento. La norma nacional está en proceso de consulta y participación y es pública para que se puedan presentar alegaciones al proyecto. Luego viene la tramitación, por lo que pensamos que al final de este primer semestre podría estar aprobada. Esa norma tiene tres ideas fuertes. La primera es que no se podrán utilizar en las aceras, porque son para el peatón y por ellas solo podrán ir juguetes con una velocidad máxima de 6 kilómetros por hora. La segunda es que habrá un control y una homologación para que no nos entre cualquier tipo de producto. En tercer lugar los patinetes no podrán ir por la carretera, por lo que podrán ir por la calzada en la ciudad o por el carril bici. Nosotros damos un marco general y luego los ayuntamientos gestionan su vía pública. Los patinetes, como mucho, pueden sustituir algún desplazamiento a pie y no sé si es una buena idea hacerlo.
–¿Pueden ser un peligro?
–Salió una noticia de una señora de 80 años que había muerto y cundió el pánico. Parecía que todos podíamos morir atropellados por un patinete y se presionó a la DGT pero no veo riesgo, hay que situar las cosas en su justo contexto. Entre todos lo hemos exagerado.
"Las calles de un carril en el centro tendrán una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora”
–Han hablado de reducir la velocidad a 30 kilómetros por hora en el centro de las ciudades. ¿En qué momento está esa idea?
–Las zonas 30 las están haciendo las ciudades en España y ya hay varias con ordenanzas que la incluyen como Bilbao. Nos pidieron ayuda y desde la DGT estamos preparando un Real Decreto para que las calles de un único carril sean de 30 en toda España y el que quiera 50 tendrá que poner una señal específica.
–¿Cuándo estará el Real Decreto?
–Para finales de este semestre.
–¿Ha recibido muchas críticas por bajar de 100 a 90 la velocidad máxima en las carreteras de doble sentido interurbanas?
–Bajar la velocidad es un carretera es un tema muy conflictivo y se le tiene mucho respeto desde un punto de vista político porque suele haber muchas críticas. Pero en España lo hemos explicado, la gente lo ha entendido y no ha habido una gran contestación social.La gente es consciente del drama de los accidentes de tráfico, que alguna medida hay que tomar y que ésta entra dentro de lo razonable. El 75% de los accidentes son este tipo de carreteras y es sentido común.
–Lleva un mes. ¿Está funcionando? ¿Hay menos accidentes?
–Necesitamos un año para poder hacer un seguimiento riguroso y solvente. Con un mes solo no nos atrevemos.
–¿Cree que bajarán este año los accidentes y la mortalidad?
–Para eso trabajamos. Si somos capaces de mantener en la agenda política y en el debate público el tema de los accidentes probablemente bajarán.
–Las distracciones son la primera causa de accidentes. ¿Cómo lo van a controlar?
–Sí, es un problema emergente que pasa en toda Europa. No es solo un problema de seguridad vial sino social porque hay una dependencia del teléfono móvil. Nosotros vamos a informar, concienciar, vigilar y controlar todo lo que podamos. Hay teléfonos que tienen un modo conducir, hay aplicaciones que avisan al que te llama que estás conduciendo...Se están buscando fórmulas tecnológicas que ayuden.
–El manos libres lleva ya muchos años implantado. ¿No se usa?
–El problema es el whatsapp porque la gente se pone a leer y escribir mensajes. Conducir necesita toda la atención. El manos libres tiene riesgo porque tienes la cabeza pendiente a la conversación. Cuando salió el manos libres entró con tal potencia y le hacía tanta ilusión a los ciudadanos que no pudimos pararlo. Nos pasó por encima. Pero no es una buena idea desde el punto de vista de seguridad vial.
"Dicen que el coche inteligente irá sin conductor y pensamos que el conductor inteligente irá sin coche”
–Este año la campaña de la DGT es bastante dura. ¿Por qué?
–Porque llevamos cuatro años en los que suben los accidentes y las muertes. Parece que nos hemos relajado todos y hay que despertar.
–¿Qué tienen en mente sobre el vehículo autónomo? Ya se han hecho varias pruebas.
–Dicen que en el futuro el coche inteligente irá sin conductor y nosotros tenemos la impresión de que el conductor inteligente irá sin coche. No estamos volcados en ese tema. El problema de la movilidad es el espacio que ocupa el coche, no que vaya con conductor o sin él.
–Por último, ¿están satisfechos con el carné por puntos?
–Ha funcionado y tenemos en estos momentos en trámites un proyecto de ley para actualizarlo. Habrá varias medidas, pero las más vistosas son que se perderán seis puntos por utilizar manualmente el teléfono y se sube de tres a cuatro puntos no ponerse el cinturón o el casco porque, si después de 12 años, con todas las campañas que hemos hecho y todo lo que se ha explicado no te lo pones es porque no te da la gana.
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