El Pleno reclama un plan de inversiones para obras hidráulicas

Concentración de trabajadores de Limasa a las puertas del Ayuntamiento. / Javier Albiñana

El último episodio de gota fría ocurrido en la provincia de Málaga, con precipitaciones de casi 400 litros por metro cuadrado en municipios del interior, da si cabe mayor trascendencia al acuerdo adoptado ayer por unanimidad en el Pleno del Ayuntamiento de la capital. Todos los grupos avalaron la necesidad de poner en marcha un plan de inversiones mediante el que abordar las obras hidráulicas perentorias.

Sirva como referencia el hecho de que, según el dato aportado por el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, José del Río, la red de la ciudad está preparada para afrontar lluvias de hasta 30 o 40 litros por metro cuadrado en una hora.

De acuerdo con el sentir de la resolución, se asume que las actuaciones realizadas en los últimos ejercicios “no han sido suficientemente ambiciosas”. Frente a esta realidad, se incide en la necesidad de fijar una línea temporal de intervención y que las mismas sean acometidas en la primera ventana económica a la que tenga acceso del equipo de gobierno.

De la Torre advierte del “clima de conflictividad” en Limasa

Tras ser desalojados a primer ahora de la mañana, después de pasar la noche de ayer en la Casona del Parque, el comité de empresa de Limasa hizo un llamamiento a la plantilla para, a las 20:00, concentrarse a las puertas del Ayuntamiento como gesto de presión al equipo de gobierno para negociar los atrasos a los que, según los operarios, tienen derecho tras varias sentencias judiciales. La petición fue atendida por del orden de un centenar de operarios. Por la mañana, el alcalde tendía la mano a ese diálogo pero advertía de que el “clima de conflictividad” que podría generarse no era bueno de cara a la ciudadanía. En cualquier caso, la palabra huelga sigue sin ser pronunciada.

De igual modo, en el marco de una moción urgente del PSOE, se aprobó por unanimidad crear un plan integral de limpieza del alcantarillado; así como desarrollar un plan de mantenimiento que delimite las competencias para limpieza y mantenimiento de los mismos. No fue ésta la única moción sobre prevención de inundaciones tratada en la sesión de ayer.

También fueron aprobadas por unanimidad las iniciativas de Málaga Ahora y la ordinaria de Málaga para la Gente, en las que se instaba a los gobiernos central y regional a colaborar para dar una “solución definitiva” a la cuenca del Guadalmedina, elaborando un proyecto que incorpore una solución hidráulica. Asimismo, se reclamó al Ayuntamiento intensificar las labores de mantenimiento, limpieza y obras necesarias para dejar los cauces en condiciones óptimas. Otra de las exigencias al Ejecutivo local fue impulsar las actuaciones necesarias para lograr una red de pluviales y red de fecales completamente separadas.

Del Río provechó su intervención para poner en valor que es el Ayuntamiento el que, “a pulmón”, ha invertido en los últimos años 5,5 millones. Y acusó al PSOE de “ningunear” a Málaga “en todas las grandes inversiones que son necesarias”. El alcalde, Francisco de la Torre, destacó la necesidad de que las obras sean ejecutadas por todas las administraciones y de disponer de fondos europeos. También tuvo el apoyo general uno de los puntos de la moción urgente de Cs relativo al canon del agua. En el mismo se reclamó a la Junta que promueva de manera “urgente y prioritaria” la construcción de la EDAR Norte.

Avanza el plan para reducir el ruido en el Centro y Teatinos

El PP, con el apoyo de Málaga Ahora y Málaga para la Gente (Ciudadanos y PSOE votaron en contra), sacó adelante la delimitación de buena parte del Centro histórico y de parte de Teatinos como Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS). Ahora se abre un periodo de información pública de un mes al que podrán acudir todos los colectivos interesados para presentar sus alegaciones. Entre las cuestiones a estudiar están las aportaciones realizadas por el secretario general en un informa de hace unos días. En el mismo, pone en consideración la posibilidad de que la vigencia de las medidas de las ZAS no sea anual sino de hasta cinco años. Al tiempo, duda de la propuesta de restringir levemente el horario de las terrazas. El texto actual contempla que las mismas estén instaladas hasta las 01.00 de domingo a jueves, mientras que los viernes y sábados se extiende el horario hasta las 02.00 en otoño e invierno. En primavera y verano el horario se establece hasta las 02.00 todos los días. Asimismo, se exceptúan de esta limitación Semana Santa, Navidad, Carnaval y Feria. Otra de las medidas que ha despertado el rechazo del sector de la hostelería es la aplicación de una moratoria a la concesión de licencias para nuevos establecimientos. Este colectivo ya ha iniciado una campaña con el reparto de 3.000 chapas y 2.500 carteles oponiéndose a esta iniciativa.