Proyecto Hombre alerta del aumento de las borracheras entre menores
Uno de cada tres estudiantes de 14 a 18 años reconoce haberse emborrachado en el último mes · La edad media de inicio en el alcohol es de 14 años · Los adolescentes suelen adquirir las bebidas en tiendas de barrio
La alerta la ha hecho Proyecto Hombre, una ONG que lleva 25 años sacando a jóvenes de distintas adicciones: se está produciendo un incremento de las borracheras entre los menores, una tendencia que la organización achaca a la permisividad social hacia el alcohol.
"Está prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores, pero nadie se emborracha con leche o Fanta. La realidad es que no les resulta complicado conseguir el alcohol. No podemos ponernos una venda en los ojos", afirmaba ayer el director de Proyecto Hombre en Málaga, Juan José Soriano.
Según Belén Pardo, técnico de prevención de la asociación, el problema no son las grandes superficies -que piden la documentación y no venden alcohol a menores- sino las tiendas de barrio que en algunos casos se saltan la prohibición. Aunque también está la trampa de que el mayor del grupo, que puede tener 18 ó 19, sea el que compre las bebidas.
Proyecto Hombre lanza su advertencia basándose en la Encuesta Estatal sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias (Estudes). Según este informe, tres de cada 10 estudiantes de entre 14 y 18 años reconoce haberse emborrachado alguna vez en el último mes.
Desde la ONG se alerta de que en comparación con la encuesta anterior, se observa una reducción en el consumo de la mayoría de las sustancias adictivas, "pero aumenta el consumo intensivo de alcohol". Es decir, las borracheras.
Las estadísticas de Estudes reflejan además que el alcohol, el tabaco y el cannabis son las drogas más consumidas. De los estudiantes de 14 a 18 años encuestados, el 73,6% admitió que en el último año había consumido alcohol; el 32,4% tabaco y el 26,4% cannabis.
De acuerdo a los datos de Proyecto Hombre recogidos entre 239 jóvenes que participan en sus programas de prevención, un 33% de los adolescentes encuestados indicaron que consumían alcohol de forma continua (tres o cuatro fines de semana al mes); un 28,5% de manera habitual (una o dos veces al mes), un 30,5% de forma esporádica (menos de una vez al mes) y el 3% a diario.
De esa muestra se desprende también que la edad media de inicio en el consumo de alcohol es de 14 años, aunque la edad mínima registrada se sitúa en 11 años, según Proyecto Hombre. La ingesta de alcohol no suele ir sola. Un 83% consumía además cannabis y un 17% también cocaína. De esa encuesta hecha por la ONG entre los participantes en sus programas de prevención, uno de cada cinco adolescentes (20%) tenía familiares con problemas de alcoholismo.
Por su parte, del informe Estudes se concluye que el consumo de drogas legales -entre las que está el alcohol- en general está más extendido entre las mujeres. Sin embargo, los hombres que consumen alcohol lo hacen con mayor intensidad, tanto en frecuencia como en cantidad. "Además, el alcohol es la sustancia que se percibe como menos peligrosa", advierte la ONG.
Soriano apunta que el problema es que "somos una sociedad superpermisiva" con la bebida: "El alcohol está legalizado y consideramos que no es una droga. No se entiende una celebración sin alcohol, lo que ya le da validez al consumo". Ante el incremento de borracheras entre los menores, Proyecto Hombre reclama una red de prevención que permita retrasar la edad de inicio y, si fuera posible, frenar su consumo.
Según la Memoria de Proyecto Hombre, el alcohol es la droga más consumida (51,19% ) entre los 14 y los 18 años. La demanda de deshabituación del alcohol en la ONG se ha multiplicado por 19 desde 1996 (1,59%) a 2009 (30,04%).
También te puede interesar
Lo último