El TSJA insiste para que se corrija el último examen de las oposiciones a bombero en Málaga

Un nueva sentencia deja atrás los pronunciamientos contradictorios de los jueces de lo Contencioso-Administrativo que instaban repetir la prueba

El Ayuntamiento asegura que ya se dirigió a la autoridad judicial con una propuesta de ejecución

Bomberos de Málaga capital durante una actuación. / Javier Albiñana

Málaga/Nueva llamada de atención al Ayuntamiento de Málaga sobre las oposiciones a bombero que se celebraron en 2015 y que acabaron con una decena de pleitos en el Contencioso-Administrativo. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha insistido en que el Consistorio debe volver a corregir el último de los exámenes con un reparto de la puntuación proporcionada.

La que se convierte en la cuarta sentencia del alto tribunal andaluz viene, además, a terminar con los pronunciamientos contradictorios dictados en primera instancia. Varias sentencias obligaban a la repetición del examen y no su corrección, que es lo que los demandantes habían pedido.

Por lo que el TSJA viene a cerrar esas dudas, en las que la administración local se ha apoyado durante años, y a ordenar de nuevo "retrotraer el proceso selectivo al momento de la calificación del tercer ejercicio, para que la valoración de las preguntas del mismo lo sean de forma proporcionada". Exactamente en los mismos términos en los se viene pronunciado desde que en abril del pasado 2019 lo hiciera por primera vez sobre este asunto.

Lo que deja sin efecto la sentencia recurrida en esta ocasión, de mayo de 2017 del Contencioso número 7, en la que el magistrado ordenó "que se celebre nuevamente el tercer ejercicio (práctico) de la fase de oposición.

El TSJA ya advirtió en anteriores sentencias de que iba a seguir fallando -en los recursos que aún quedan pendientes- en la línea de retrotraer las oposiciones hasta el punto exacto de la corrección de la tercera y última prueba: “habiendo la Sala confirmado el pronunciamiento que en supuesto idéntico hizo el titular del juzgado nº 5 de capital, hemos de seguir asumiéndolo”, aseguraba en uno de sus dictámenes.

Unos pronunciamientos en los que el alto tribunal ponía el acento en que “es la solución que mejor se acomoda a las circunstancias del caso, en el que por inadvertencia debe entenderse que los opositores concurrieron al ejercicio en la natural presunción de que todas las preguntas tenían asignada la misma puntuación, acometiendo su desarrollo conforme a esta convicción”.

El primero de los fallos dictados TSJA pasó a ser firme en junio del año pasado. El aspirante que ganó el caso solicitó la ejecución forzosa en los juzgados, todo ello después de que el Ayuntamiento agotara los dos meses de los que disponía para cumplir el dictamen de forma voluntaria.

El Ayuntamiento de Málaga asegura que ya se ha dirigido a la Autoridad Judicial con una propuesta de ejecución que va en el sentido de acatar esa corrección del tercer y último examen de las oposiciones. Aunque, insisten, igualmente, en que están a la espera de contestación para que les indique el modo de proceder.

Estas sentencias del Alto tribunal andaluz vienen a dar por cerrado un procedimiento que se inició hace cinco años. Entonces una decena de opositores que se quedaron sin plaza acudieron a los juzgados de manera individual para denunciar la corrección del tercer y último examen de las pruebas para convertirse en bombero en la capital. A ese supuesto práctico-teórico se le asignó diferente puntuación para cada una de las preguntas, pero tras la celebración del examen, por lo que los aspirantes se enfrentaron a la prueba sin conocer el valor de cada una de ellas.

Un año desde la primera sentencia firme

La primera vez que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) se pronunció sobre las oposiciones a bombero de la capital de 2015 fue en abril del año pasado. Y lo hizo en el mismo sentido que lo hace ahora, instando al Ayuntamiento a volver a corregir el examen asignando una puntuación proporcionada a las preguntas. Dos meses más tarde, en junio, se declaró la firmeza de la sentencia, al no presentar ninguna de las partes recurso ante el Supremo. El aspirante a bombero que ganó el caso solicitó dos meses después la ejecución forzosa de sentencia. Sin embargo, ha pasado más de un año y continúa a la espera de que el juez dé el paso definitivo y obligue al Consistorio a acatar el dictamen.

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