La Viñuela alcanza su mínimo histórico

Málaga/La falta de precipitaciones hace que la sequía y la situación de los embalses de Málaga se agrave día a día. Actualmente, los pantanos malagueños están a un tercio de su capacidad y en la Viñuela ya se ha alcanzado el mínimo histórico al que llegó en 2008, es decir, actualmente se encuentra al 9,2%.

Entre los siete embalses malagueños suman 205 hectómetros cúbicos, lo que significa que están al 33% de su capacidad total. La situación más preocupante la está viviendo el pantano de La Viñuela, el más grande de la provincia con capacidad para 164 hectómetros cúbicos. Actualmente, está al 9,23%, lo que quiere decir que ha alcanzado el mínimo histórico al que llegó en 2008. El agua del pantano apenas pasa de los 15 hectómetros cúbicos, cifra que el año pasado en estas fechas era casi el doble, ya que el embalse contaba con 29,41 hectómetros cúbicos.

Asimismo, el embalse del Conde del Guadalhorce está al 25,78% de su capacidad y el del Guadalhorce se encuentra al 32,56%. Por otro lado, el del Limonero y Casasola están al 40,7% y al 47,7%, respectivamente y juntos cuentan con 19 hectómetros cúbicos. El embalse de la Concepción está al 47,86% y atesora 27 hectómetros cúbicos. Por último, el único embalse que cuenta con más de la mitad del agua que puede abarcar es el de Guadalteba que a día de hoy tiene 85 hectómetros cúbicos y se encuentra al 55,88% de su capacidad.

Tras vivir el quinto año hidrológico más seco desde que se comenzaron a contabilizar a nivel provincial en 1961, la falta de precipitaciones hace que los regantes estén preocupados por sus cultivos. Los datos reflejan que en el año 2021/2022 han caído 406 litros por metro cuadrado de media en Málaga, es decir, solo se recogieron el 61% de los litros habituales.

Aunque ha habido leves precipitaciones este mes de noviembre, tanto en los cultivos de la Viñuela como en el Valle del Guadalhorce, apenas se dejaron notar, puesto que cayeron unos dos litros y unos cinco litros por metro cuadrado, en cada sitio respectivamente. Las consecuencias de esta sequía está afectando, en mayor medida, al campo. A día de hoy, como ya han asegurado los regantes a este periódico, los cultivos hortícolas son los que más peligro corren de perderse si no llueve. En cambio, los cultivos arbóreos aguantan un poco más, pero también necesitan agua antes de que se deterioren hasta el punto de no poder recuperar.

Los regantes fueron claros: “mientras que no llueva la situación no va a mejorar”. En este sentido, para que las precipitaciones se dejen notar en los cultivos, según informó el presidente de la Junta Central de Usuarios del Sur del Guaro y de la comunidad de regantes Cerro de la Encina (en Vélez-Málaga), José Campos, tienen que caer 80 o 90 litros, “no de golpe”, sino de forma prolongada.

Ante una situación “cada vez más irreversible” si no llegan las precipitaciones, los agricultores de la Viñuela intentan mantener sus cultivos, regándolos con las aguas regeneradas de los terciarios. La EDAR de Vélez-Málaga es el que les está proporcionando el agua necesaria a estos regantes, junto con el agua de los pozos que algunos agricultores tienen en sus tierras. Así pues, esperan que finalicen lo antes posible las obras de conexión de los tratamientos terciarios de la EDAR de Rincón de la Victoria con los regadíos del Plan Guaro.

En esta misma situación se encuentran los regantes del Valle del Guadalhorce, que también necesitan agua para salvar sus cultivos. La Asociación Provincial de Regantes de Málaga (Aprema) aseguró a Málaga Hoy que para que se notaran las lluvias en los cultivos necesitan que caigan unos 40 o 50 litros.

La situación podría cambiar en este inicio del mes de diciembre, ya que según la Agencia Estatal de Meteorología, las lluvias podrían llegar a la provincia de Málaga a partir de este jueves. Asimismo, si la situación no cambia, las precipitaciones se podrían mantener hasta el domingo y con mayor intensidad en la zona occidental del mapa.