Voto de confianza del taxi de Málaga a la Junta, a la que reclama celeridad ante las VTC
Movilidad
Varios colectivos advierten de la posibilidad de retomar las movilizaciones si no se aportan soluciones en dos semanas
El taxi en Málaga y la Costa del Sol aguarda, expectante, a que la Junta de Andalucía, en un plazo de dos semanas, ponga sobre la mesa medidas concretas que permitan dibujar una hoja de ruta con la que regular el sector de las VTC. Los colectivos malagueños presentes este jueves en la reunión celebrada en Sevilla con la nueva consejera de Fomento, Marifran Carazo, han admitido sensaciones positivas tras conocer la voluntad de la Administración regional de intervenir, aunque han advertido de que en caso de que no se adopten medidas "que sirvan al sector tomaremos las medidas que tengamos que tomar". La cita ha tenido lugar tras la exigencia realizada por el sector.
El presidente de Élite Costa del Sol, Guillermo Díaz, ha valorado la posición inicial de la consejera de "no enrocarse" en este asunto, insistiendo en que el camino "es regular". "Vamos a confiar en ella", ha afirmado, recordando que el taxi de Málaga ha dado muestras de compresión al aplazar dos concentraciones que estaban previstas para el día de ayer y coincidiendo con la celebración del primer Consejo de Gobierno andaluz, que tuvo lugar en Antequera.
"Algo nos tenemos que traer el día 14 (fecha en la que está prevista la nueva reunión con la Junta); si no la situación se pondría bastante complicada", ha señalado Juan González, representante de la Confederación de Taxis de la Costa del Sol. Una idea sobre la que ha abundado Díaz, dando a entender que si no se produjesen avances se reactivarían las medidas de presión iniciales.
Si bien el conflicto con las VTC puede generalizarse a toda la región andaluza, las estadísticas oficiales ponen de manifiesto que es Málaga la provincia española en la que mayor proporción de VTC hay respecto a taxis. De manera precisa, según los datos del Ministerio de Fomento a inicios de enero, se cuentan 1.184 autorizaciones de vehículos de turismo con conductor (VTC) por 2.662 licencias de taxi. O lo que es lo mismo, un VTC por 2,2 taxis. Unos parámetros en las antípodas de la proporción acordada por ley de 1/30.
A pesar de estas circunstancias, los colectivos provinciales han incidido en que el objetivo no es "eliminar a nadie" sino ordenar el funcionamiento de un sector que, con las aplicaciones de Uber y Cabify, están "canibalizando el servicio del taxi".
El portavoz de Élite Costa del Sol criticó que en todos los años en los que el sector ha venido denunciando la situación "nadie ha escuchado; las VTC han ido creciendo pero nadie ha dicho nada". "Cada día nos dan un pellizco más a nuestro trabajo; que ellos trabajen su sector", insistió Díaz, quien añadió: "cada día son muchos coches negros los que vemos en las puertas de las discotecas, de los colegios, en los conciertos...".
En este sentido, han valorado la labor que realizan en la Costa del Sol las empresas de VTC tradicionales, aquellas que funcionan mediante precontratación, y con las que el taxi "lleva conviviendo desde hace 40 años". "Lo que se pide es una regulación; las VTC tratan de suplantar al servicio del taxi y vamos a defender nuestros puestos de trabajo", ha sentenciado. De acuerdo con los datos manejados, pueden ser del orden de 3.600 las personas vinculadas al taxi en la provincia, incluyendo asalariados.
El sector calcula una caída del 18% de clientes por los servicios de Uber y Cabify
Uno de los efectos que más claramente perciben los taxistas de la provincia de Málaga tras el desembarco de vehículos de Uber (el pasado verano) en la capital de la Costa del Sol y otros municipios y de Cabify es una destacada caída en el número de clientes. Guillermo Díaz, responsable de la asociación Élite Costa del Sol, ha señalado que esta merma puede situar en entre un 15% y un 18%. Algo que redunda de manera negativa no solo en los ingresos de los profesionales, sino también en una extensión del número de horas que tienen que estar al volante para lograr los mismos resultados.
Díaz, en alusión directa a Uber, ha puesto de relieve que si bien llegaron con la idea de contar con varios cientos de vehículos, "sólo pudieron trabajar con 42 al principio porque no encontraban personal", debido a las condiciones laborales que se imponían. La cifra fue en aumento, según el representante del taxi, por la necesidad de encontrar trabajo de muchas personas y al hecho de que para ser conductor de estas empresas no se requiere capacitación especial alguna.
Juan González, de la Confederación de Taxis de la Costa del Sol, por su parte, ha puesto de manifiesto el carácter irregular de muchos de los servicios de ambas aplicaciones. Ha hablado en concreto de conductores que no esperan a que sus servicios sean precontratados, sino que "buscan clientes por las paradas". A esto sumó la existencia de quejas por parte de la Policía Local en el aeropuerto de la ciudad sobre conductores que carecen de la documentación necesaria para recoger pasajeros.