"Hola abuela. Te quiero, quiero volver a casa", el mensaje del niño desaparecido hace seis años en Málaga

Alex Batty cumple años el 13 de febrero, fecha que su abuela Susan Caruana nunca olvidó pese a permanecer en paradero desconocido durante seis años. Lo tenía presente en cada Navidad. Le dejaba mensajes en redes sociales en fechas señaladas, por si algún día los leía. No perdió la esperanza. "Te echamos tanto de menos que el dolor es insoportable. Rezo para que estés feliz y regreses" publicaba en diciembre de 2018; en febrero de 2021, no desistía: "Por favor dame una señal de que estás bien. Todo lo que quiero saber es que todavía estás vivo y bien. Están siendo años de tortura, mi corazón esta roto. Espero volver a verte algún día". La última vez que tuvo noticias de su nieto fue en 2017, cuando se marchó con su madre y su abuelo de vacaciones a Málaga. Esta semana, el niño -que ya tiene 17 años- ha sido localizado tras escapar de la comunidad espiritual en la que se encontraba. "Hola abuela. Soy Alex. Estoy en Francia, Tolouse. Espero que recibas este mensaje. Te quiero, quiero volver a casa" fue su primer mensaje.

Alex nació en 2006 en Odham, al noroeste de Inglaterra. Entonces Susan vivía cerca de su hija Melanie. Los veía y cuidaba del pequeño todos los días. En aquel momento, aunque la mujer ya estaba separada de David, el que había sido su marido y padre de su hija, sabía que estaba asistiendo a terapia. A su juicio, desde entonces habría cambiado radicalmente en su modo de pensar y actuar, ha explicado al periódico británico Daily Mail. "Se volvió muy espiritual. No creía en el trabajo, se atrasó con su hipoteca y las facturas".

Cuenta que Melanie, a la que recuerda como una adolescente rebelde, quedó prendada del nuevo estilo de vida de su padre e ingresó en una secta. "Empezó a viajar al extranjero con Alex, no creía en la escuela ni en la educación. Sus vidas eran caóticas", recuerda. De hecho, relata que en 2014, cuando su nieto tenía ocho años, se lo llevó a vivir a una comuna en Marruecos. David fue al poco tiempo con ellos.

Regresaron de nuevo a Reino Unido, pero en 2017, Melanie se marchó con su hijo y su padre a una villa en Málaga junto con unas diez personas más que formarían parte de una "comunidad espiritual". De hecho, el 29 de septiembre de aquel año, el propio Alex compartiría en su cuenta de Facebook la imagen de una lujosa casa. "Me voy allí en cinco días", informaba a sus seguidores. Susan Caruana no lo volvió a ver. Se le perdió la pista el 8 de octubre, día en el que estaba previsto que regresara a Reino Unido. Su abuela, a quien le pertenecía la custodia del menor, denunció su desaparición. Estaba convencida de que se encontraba en una comunidad espiritual. Pensó que estaba en Marruecos.

Efectivamente el ahora adolescente estaba en una comuna itinerante que busca un estilo de vida colectivo y alternativo. Pero, desde desde hacía al menos dos años, permanecía en los Pirineos franceses. Este miércoles, el joven, que llevaba una mochila y un patinete, fue visto por un conductor en la ciudad francesa de Revel cuando caminaba bajo la lluvia. Se lo cruzó dos veces, la segunda decidió recogerlo debido al aspecto cansado y estresado que lucía. "Durante los primeros minutos, parecía un poco tímido. Intentamos hablar en francés, pero me di cuenta de que no dominaba el idioma. Decidí hablar en inglés. Cuando le pregunté cómo se llamaba, fingió que se llamaba Zach y seguimos charlando", relataba este joven de 26 años para el medio francés La Despeche.

Tras más de tres horas de conversación, según su testimonio, le reveló su verdadera identidad, le dijo que se había marchado de aquella comuna porque "echaba mucho de menos a sus seres queridos", en especial a su abuela. Llevaba caminando cuatro días en un intento de reencontrarse con ella. Este viernes, Susan Caruana ha podido hablar con su nieto por videollamada. "Estoy en estado de shock, no puedo creerlo. He hablado con él y está bien", declaraba también a Daily Mail.

De momento, Alex permanece bajo la tutela de los servicios sociales franceses, aunque está previsto que viaje en los próximos días a Reino Unido, donde se reencontrará con su abuela. La Policía de Manchester ya investigan los hechos. Si bien, el adolescente se ha negado a decir dónde se alojaba exactamente la comunidad espiritual.