El acceso norte al aeropuerto y el AVE 'barato', claves de las cuentas del Gobierno para Málaga

Sin garantía de éxito, el Gobierno central puso el pasado viernes en marcha el proceso de presentación de los Presupuestos Generales del Estado para 2019. El paso se torna dudoso ante la debilidad del Ejecutivo, que acudirá al Congreso de los Diputados, seguramente esta semana, con la incertidumbre de si tendrá los apoyos necesarios.

Pendiente de ver negro sobre blanco las partidas ciertas, la provincia de Málaga vuelve a mirar a las cuentas estatales con la fina esperanza de que empiecen a dar respuesta a algunos de los últimos compromisos. Ya sea para sentar las bases ciertas del tren a Marbella, para poner en marcha la obra del el acceso norte al aeropuerto o para activar el AVE barato a Sevilla... La inversión asignada en 2018 fue de 142 millones de euros, incluyendo 22,4 millones para la nueva cárcel de Archidona, que ya estaba finalizada.

Aspiraciones y deseos que, en cualquier caso, pugnan con los hechos que se suceden en los últimos años, en los que la Administración central reservó partidas meramente simbólicas o no fue capaz de plasmar sobre el terreno los millones que sí asignó. El escenario presente alimenta la previsión de que las cuentas de 2019 serán poco alentadoras. El nivel de gestación en el que se encuentran las grandes reclamaciones impide objetivamente ir más allá.

El corredor ferroviario de la Costa del Sol dispuso en el presupuesto de 2018 de 6,5 millones de euros, suma con la que, según se anunció, se daría paso a la redacción de los proyectos. Sin datos oficiales que concreten el uso del dinero, la ausencia de movimientos confirman la parálisis en la que se encuentra la infraestructura.

El último anuncio en este asunto lo dio el ex ministro de Fomento Íñigo de la Serna, quien hace ahora un año, informó de las tres propuestas de trazado analizadas por los técnicos. La inversión estimada para llevar el tren a Marbella (la única ciudad de más de 100.000 habitantes sin conexión ferroviaria) ascendía a unos 2.000 millones de euros. Hoy se ignora si ha habido algún otro paso en el plano técnico que permita estrechar el cerco sobre esta gran obra, puesta sobre la mesa en 2000 por el entonces presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves.

Con todo, lo más que se puede prever es una reserva escueta para, quizás, ultimar, el plano técnico y teórico por el que transita desde hace años. A ello contribuye el mensaje del delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, hace unos meses, cuando admitió la necesidad de abrir una reflexión sobre esta intervención debido a su alto coste económico.

2019 debe ser, a priori, el año en el que el Gobierno afronte el impulso de la obra del baipás de Almodóvar del Río, conexión mediante la que acortar en unos 20 o 30 minutos el actual recorrido ferroviario entre Málaga y Sevilla. Los PGE de 2018 consignaron para esta actuación 12,4 millones (en la parte de Córdoba). Un dinero de nula aplicación ante la necesidad previa de disponer del proyecto constructivo que fue encargado a finales de enero del año pasado a Ayesa Ingeniería y Arquitectura SAU. La firma disponía de un año para dar forma al documento.

Otro tanto ocurre con el acceso norte al aeropuerto. En marzo de 2018, el Ministerio de Fomento anunció su adjudicación a una alianza empresarial encabezada por Acciona por 26,6 millones (15,5 menos que la licitación). Avanzado el trámite, se antojaba como posible el arranque de las operaciones en los meses siguientes, tarea para la que el Gobierno dispuso de 6,5 millones para el año pasado. Sin embargo, no se ha movido una sola piedra. Y no parece que lo vaya a hacer hasta al menos dentro de unas semanas, cuando quede desbloqueado el proceso de expropiación de las fincas a ocupar.

Los Baños del Carmen volverán a ser protagonistas de las cuentas estatales, ya sea por su presencia o ausencia. La envergadura de la apuesta, si es que la hay, estará supeditada a la conclusión del estudio de impacto ambiental encargado para determinar la posible afección sobre el ecosistema del enclave. A esto se suma la apuesta reciente del Ejecutivo por abrir un proceso de diálogo con el Ayuntamiento y la Junta para definir el proyecto de intervención terrestre, a priori, en la idea dar forma a parque público.

Con el antiguo Convento de San Agustín, espacio elegido para emplazar la Biblioteca Provincial del Estado, ocurre algo semejante. La intención última del Ministerio de Cultura pasa por poner en marcha la maquinaria de recuperación del espacio a lo largo de 2019. A ello se comprometió en octubre el director general de Bellas Artes, Román Fernández-Baca, aunque ello en buena medida va a depender de la segunda fase de excavaciones arqueológicas que se ejecutan en el inmueble. 1,3 millones de euros era lo que estaba reservado el pasado año para este proyecto.

Todas son referencias ya reseñadas en las cuentas de 2018. Queda por ver si con el nuevo Ejecutivo del PSOE se incorporan otras demandas de las que hizo gala la formación socialista en los últimos tiempos, caso de la prolongación del Cercanías al PTA; el soterramiento del ferrocarril al puerto de la capital o el recrecimiento de la presa de La Concepción.