Adif ya trabaja en aumentar el tamaño de los andenes del Cercanías para que vayan más pasajeros entre Málaga y Fuengirola

El Cercanías de Málaga sigue al tope de sus capacidades. Y sin mucha posibilidad de mejora a corto plazo, constreñido por cuatro estaciones con andenes de 80 metros en los que no entran trenes más grandes de los que ya circulan y van el 80% al límite de sus capacidades, según un informe del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). El mismo está ya trabajando en el estudio para que estos cuatro apeadores crezcan hasta los 100 metros que permitan aumentar el número de pasajeros por frecuencia.

Así se lo comunica, en una carta a la que ha tenido acceso este periódico, el director general del Sector Ferroviario, Carlos María Juárez, a los alcaldes de Málaga, Torremolinos, Benalmádena y Fuengirola, en respuesta a la misiva que estos le enviaron para pedirle una mesa específica para este medio de transporte. Esta obtuvo respuesta desde Madrid (los regidores aquejaban que en ocasiones anteriores sus cartas no habían corrido la misma suerte), pero no exactamente en la línea en la que los representantes municipales demandaban.

En su carta; Francisco de la Torre, Margarita del Cid, Juan Antonio Lara y Ana Mula; pedían una reunión para abordar las medidas que necesitaba el ferrocarril de próximidad en su línea C1, la más demandada, y que estas tuvieran cierta celeridad. Todo lo contrario, desde Madrid se les ha trasladado que las dos únicas mesas técnicas que se mantendrán serán las que se acordaron tras la gran cumbre de verano (que se celebran, por primera vez, este jueves 28) y que, lejos de tener reuniones específicas por el Cercanías, sería conveniente "tener encuentros técnicos" particulares con cada uno de los municipios.

Ahora mismo, los Cercanías de Málaga –en composiciones de 80 metros– pueden transportar hasta 800 viajeros por frecuencia. Y la solución que parece más factible a la hora de aumentar la capacidad de unos trenes con tal alta demanda es hacerlos más grandes, en tanto que el modelo que recorre las vías malagueñas puede añadir módulos y crecer. Pero tiene el citado inconveniente de cuatro apeaderos que no pasan de los 80 metros. Siendo el de Benalmádena el que, a priori, presenta mayores dificultades.

La segunda de las vías para la mejora del Cercanías que se encuentra en las mesas de trabajo del ministerio es la de reducir la frecuencia de paso. Hace ya un año que el ministro de Transportes, Óscar Puente, anunció la voluntad de rebajar el tiempo de paso de los 20 minutos actuales a los 15. Para eso es necesario desdoblar por completo la vía, que en la actualidad es de vía única en un tercio del recorrido.

Un tramo de la línea, el que discurre entre el aeropuerto y Campamento Benítez, ya está en proyecto para poner esa doble vía, que tardará, al menos, tres años de cumplirse con todos los plazos establecidos. Por sí misma, esa actuación no servirá para reducir el tiempo de paso de los trenes, pero sí que podrá utilizarse para recuperar tiempo cuando haya alguna incidencia.

Juarez señala que "estos estudios [tanto el de aumentar la frecuencia como el de ampliar los andenes] se encuentran en fase de definición precisa de las interferencias urbanísticas, y en cuanto se disponga de la misma, algo que ocurrirá en los próximos meses, nos pondremos en contacto con los Ayuntamientos afectados para informarles de las conclusiones y recoger sus sugerencias con objeto de minimizar las posibles molestias durante la fase de obras y obtener un resultado óptimo no solo desde el punto de vista del transporte, sino también desde una óptica urbana. Como es obvio, cada municipio tiene su configuración topográfica y urbanística particular por lo que las circunstancias y soluciones serán distintas y deberán tratarse caso a caso".