Quizás
Mikel Lejarza
Toulouse
Pasaban las 23 horas del pasado lunes cuando el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, sufrió una lipotimia, un desmayo, durante un cóctel con motivo de Ametic, un Encuentro de Economía Digital y Telecomunicaciones, en Santander. El regidor, de 81 años, fue atendido por un médico presente en la sala y trasladado al hospital, donde permaneció unas dos horas esperando el resultado de los análisis de sangre.
El suceso no revistió gravedad, en tanto que pudo dormir esa noche en su hotel y al mediodía siguiente visitó San Sebastián, donde tuvo un encuentro con el alcalde de la localidad, Eneko Goia, después de acudir por la mañana al foro santanderino. Desde el Ayuntamiento confirman que la lipotimia –sensación de pérdida de la consciencia, sin llegar a perderlo por completo ocasionada por una disminución del flujo sanguíneo del cerebro– fue leve y que acudió al hospital por precaución.
A su vuelta de San Sebastián, se incorporó, ya en la noche, al cóctel de unas jornadas Puerto-Ciudad que se celebraban en paralelo a Ametic –cita que se ha convertido en un fijo en la agenda del alcalde en los últimos años– y al día siguiente, ya miércoles 4 de septiembre, intervino en dichas jornadas junto al presidente del puerto de Málaga, Carlos Rubio y viajó a Bilbao para volver a Málaga por la noche.
De vuelta a la Costa del Sol, continuó con su agenda tal y cómo la tenía prevista y estos días se le ha podido ver en ruedas de prensa o en la procesión por la festividad de la Virgen de la Victoria este pasado domingo.
De la Torre se sometió hace un año, el 29 de junio de 2023, a un cateterismo para tratar la fibrilación auricular, es decir, regular los latidos cardíacos. Esto es una "crioablación de venas pulmonares", una "intervención sencilla", según explicó el propio regidor a través de un mensaje difundido en sus redes sociales.
Expertos consultados al respecto resaltaron que la causa más común de esta alteración del ritmo cardíaco es la situación de estrés. El máximo responsable de la Casona del Parque restó importancia a lo sucedido tras su ingreso en el Hospital Regional de la capital, donde solo permaneció un día, ya que el viernes 30, apunta, retomó su agenda institucional.
Sólo unos meses más tarde, en octubre del mismo 2023, pasó un pequeño test junto a algunos pruebas para determinar su edad metabólica. El resultado: 65 años, 15 menos que la biológica –aún le quedaban meses para cumplir los 81 años–. Si bien es harto comentado lo bien que se mantiene el regidor a pesar de su edad, sigue sorprendiendo saber –o al menos los comentarios entre distintos miembros del partido al respecto así lo constataban– la más que notoria diferencia entre biografía y el estado fisiológico. "Estoy seguro que si me hago yo la prueba me sale más edad que el alcalde", bromeaban varios populares de mediana edad en un corrillo cuando conocieron el dato.
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