Dos años de prisión para el acusado de disparar a El Cachulo

El hombre que el 17 de diciembre de 2009 disparó con una escopeta a R. F. R., conocido como El Cachulo, ha aceptado una condena de año y medio de prisión por un delito de tentativa de homicidio y otro de tenencia ilícita de armas.

La sentencia explica que el acusado, Alejandro S., "ofuscado" porque su pareja había sido agredida durante una pelea con unas vecinas cogió una escopeta de caza, que no ha podido ser localizada, y acudió a un bar de El Palo donde le preguntó a la víctima dónde estaban su mujer y su sobrina porque "las tenía que matar".

Como le respondió que allí no había ninguna mujer, Alejandro le replicó que le iba a pegar un tiro y, a unos 12 metros de distancia, apretó el gatillo y huyó a la carrera.

El Cachulo sufrió numerosas heridas por arma de fuego en la región frontal derecha, cuello, hombro y el pecho, llegando a incrustarse un fragmento metálico en un pulmón. Estuvo cinco días en el hospital y en conjunto tardó 126 días en reponerse de las lesiones.

El tribunal aclara que le han quedado varias secuelas entre las que figuran cuerpos metálicos a nivel subcutáneo y muscular, dolor en un hombro y agravación de la patología psiquiátrica que padecía con anterioridad, además de consecuencias estéticas.

La condena se ha dictado previa conformidad del fiscal, la víctima y el acusado, que en febrero de 2010 consignó 2.500 euros a cuenta de la indemnización de 180.000 euros que ahora le ha impuesto la sala con el acuerdo de todas las partes.

El Cachulo fue condenado en abril de 2001, cuando todavía era menor de edad, por la muerte de un vecino de El Palo al que acuchilló reiteradamente en presencia de terceros en un bar poco después de que le llamara la atención por gritar.

Un juez de Menores de Málaga le impuso ocho años de reclusión en un centro cerrado y a cinco de libertad vigilada por homicidio. Este crimen tuvo lugar cuando el joven disfrutaba en su barrio de un permiso que le permitió salir de un centro de Sevilla donde estaba internado por un intento de homicidio cometido con anterioridad.