El arte del dinero

La pintora malagueña Mari Roldán recrea en billetes obras clásicas y los pone en circulación

Mari Roldán con dos de sus obras.
Mari Roldán con dos de sus obras. / Javier Albiñana
María Ramos

20 de marzo 2022 - 07:22

Málaga/Si tienes suerte, los billetes que te den en el supermercado cuando recibas el cambio podrán llevar una sorpresa. Mari Roldán, una artista malagueña de 27 años, lleva seis años poniendo en circulación verdaderas obras de arte. La pintora malagueña dedica su vida a revalorizar el dinero recreando en los billetes pinturas clásicas como Guernica, El Beso o La Noche Estrellada. Sus planes de ser azafata se torcieron y Roldán decidió que si no era ella quien podía recorrer el mundo, que su arte sí que podría hacerlo y así decidió llenar de colores el objeto con mayor capacidad intercambio del mundo: el dinero.

Cuando acabó Bachillerato, Mari Roldán empezó a estudiar para convertirse en azafata de vuelo, pero al tener tatuajes no pudo seguir con su carrera. Una decepción en su momento a la que ahora da gracias. Tras este suceso, la malagueña comenzó a pintar billetes. “Ya que yo no podía viajar, pues que mi arte lo hiciese por mí”. Este fue el motivo que le animó a escoger este soporte tan peculiar. La artista afirma que es una vocación: “llevo pintando desde chiquitita, siempre quise dedicarme a esto y ahora consigo vivir de ello”. La joven habla entusiasmada de su vocación, explicando que nunca ha llegado a estudiar nada relacionado con Bellas Artes y que el único descendiente que le inculcó esta pasión por la pintura fue el primo de su abuelo, que pintaba carteles de cine.

Algunas de las obras de Mari Roldán.
Algunas de las obras de Mari Roldán. / Javier Albiñana

En sus inicios en 2017 ella ponía en circulación los billetes pagando en supermercados con ellos, pero cuando pintó la cuarta obra, un italiano contactó con ella a través de redes sociales para comprarle uno. A partir de ahí, todo fue creciendo hasta llegar a tener su propia tienda online. “La mayoría de ventas que hago son a Italia, sobretodo a Milán y alrededores. Parece que allí soy famosa”, bromea la chica. El precio de las obras oscila entre los 100 y los 400 euros y afirma que también pinta monedas, que se venden a unos 250 euros dependiendo del tiempo que tarde en realizarlas. Sin embargo, a pesar de que ahora vive de esto, continúa con la tradición de pagar con los billetes pintados, ya que quiere mantener la esencia por la que empezó con la tarea.” Antes ponía en circulación dos o tres a la semana, ahora intento pagar con cuatro billetes pintados al mes”. Por otra parte, deja sobres con sus obras por la ciudad de manera esporádica para que los malagueños se lo encuentren, con el mismo objetivo: que el arte traspase fronteras, ya que afirma que la mayoría de las veces cuando paga en los establecimientos, las dependientas se lo suelen quedar y les hace ilusión, aunque otras veces no se dan cuenta y Mari consigue su objetivo, que sigan circulando. “Me gusta cuando me contacta gente a la que le han llegado mis obras, aunque la anécdota que más feliz me hace es que he recibido mensajes de personas que se han puesto a pintar porque mis billetes le han servido de inspiración”. La chica explica que el éxito también ha venido propiciado por las redes sociales, en las que cuelga vídeos sobre las reacciones que tienen los trabajadores cuando les paga con estos billetes. En Instagram tiene 41.300 seguidores y 238.900 en TikTok donde muchos vídeos se hacen virales.

Unos billetes que mantienen su funcionalidad, ya que la malagueña asegura que se informó legalmente y que mientras que la pintura no tape el número de serie ni esté pintado más del 50% del objeto, puede seguir usándose como moneda de cambio. Es difícil encontrar fallos e imperfecciones en las pinturas las cuales están hechas con acuarelas o acrílico. Las recreaciones son similares y Mari afirma que no quiere dedicarse a otros encargos. “Me gusta imitar a los grandes, no me gustaría hacer retratos personalizados ni nada por el estilo. De vez en cuando pinto algunos personajes de series o cosas así, pero no es lo habitual”, confiesa la joven quien calcula que habrá pintado unos 200 clásicos y que los encargos más recurrentes suelen ser de Klimt, Van Gogh y Sorolla. “Mi pinturas favoritas que he realizado han sido El dormitorio en Arlés de Van Gogh sobre 5€, el Guernica, por la dificultad que me supuso y Muchacha con guantes de Tamara de Lempicka sobre 100€”, confiesa Roldán.

El sueño de la malagueña pasa por la Fábrica de Moneda y Timbre, ya que afirma que si se pone a pensar, su mayor aspiración sería que el organismo público pusiese en circulación una serie de billetes con sus pinturas. Sin embargo, sin apuntar tan alto, explica que le encantaría seguir creciendo para poner su propio estudio, ya que ahora pinta en casa con sus padres. Pero otro de los sueños de esta artista reconocida a nivel nacional es exponer en Málaga. “He estado en Alemania, Londres y próximamente me voy a Madrid, pero en mi ciudad nunca he tenido la oportunidad y me haría mucha ilusión que mi familia pudiese asistir a alguna exposición mía”, confiesa la artista. “Sigo sin entender cómo le dan tantas oportunidades a artistas que son de fuera y no miran por los de aquí. Atienden mucho a la trayectoria como requisito para exponer, pero si no me dan la oportunidad de empezar, nunca tendré recorrido”.

Mari Roldán con alguna de sus obras frente al Banco de España.
Mari Roldán con alguna de sus obras frente al Banco de España. / Javier Albiñana

La joven viajará a la capital en mayo porque ha sido elegida embajadora de la Feria de Arte Internacional BADA que por primera vez se celebra en España. En 2018 realizó su primera exposición en solitario en la ciudad alemana de Lorräch. El mismo año, sus obras formaron parte de una exposición conjunta en Sotheby's Gallery de Londres y quedaron reflejadas en formato libro para la librería del Bristish Museum durante dos meses. Una trayectoria que apunta hacia el éxito y que empezó cuando cogió un bolígrafo y trazó La Creación de Adán en un billete de 10 euros hace 7 años. Ahora, un total de 1.800€ han pasado por sus manos para convertirse en millares de euros más que trascienden el valor económico de este común objeto.

stats