La caída de la natalidad y las plazas libres marcan el inicio del curso en las guarderías de Málaga

Con la mayoría de escuelas infantiles y centros iniciando el curso 2024-2025 se abren de nuevo incógnitas que el sector espera empezar a resolver en las próximas semanas. Más de 15.000 profesionales (más del 95% de empleo femenino) pondrán todo su conocimiento y entusiasmo en seguir siendo referencia en el acompañamiento emocional de los menores, ser puntos claves en la atención temprana; y ser un apoyo para las familias en el reto de lograr una verdadera conciliación profesional.

El curso empieza con un leve descenso en matrículas, apenas un 0,77% menos que el ejercicio anterior en Andalucía, pero siendo una cifra que sigue estancando la escolarización, el número de vacantes y; a la larga, el mantenimiento de una red de más de 2.000 centros y 15.000 empleos en toda Andalucía.

En la provincia de Málaga, las vacantes se elevan al 30% (7.019). Las plazas vacías siguen siendo el auténtico problema para los centros educativos, que siguen ahogados económicamente; y para las familias, que no se pueden permitir el pago de los costes, con lo que tampoco pueden darle una oportunidad educativa a sus pequeños ni lograr una verdadera conciliación social y laboral: "Hay una incertidumbre, y hay muchos centros que han cerrado, porque no pueden sostenerse. Si hubiera gratuidad, la cosa cambiaría", señala Toñi, del Centro de Educación Infantil Colorete II.

A pesar de que la bajada de la natalidad genera en este inicio de curso un descenso de alumnos, el delegado territorial de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Miguel Briones, confía en que las estimaciones de matriculación final -en esta etapa el periodo de matrícula se encuentra abierto durante todo el curso- acaben por superar los 20.478 alumnos del curso pasado y supere los 20.700.

En la inauguración del curso, que ha tenido lugar en el Rincon de la Victoria y en la que han asistido además, el alcalde de esta ciudad y el presidente de la Diputación, Francisco Salado, ha incidido en que "una provincia como Málaga receptora de población nos hace pensar que la cifra de alumnado de esta etapa pueda subir respecto al curso pasado". Por el momento, ha detallado, son 17.156 alumnos los que han arrancado el nuevo curso en los 374 centros públicos y privados de la provincia, que ofertan un total de 23.538 plazas.

Escuelas Infantiles Unidas, la principal asociación de centros de Andalucía y España, espera que este sea el curso donde se consolide la hoja de ruta de la gratuidad en Andalucía. “Las profesionales, por el contacto diario con las familias, sabemos que muchas de esas vacantes se podrían cubrir si la gratuidad fuera total en el ciclo o, al menos, en alguna de las franjas de edad”, comentó Maribel Uncala, presidenta de Escuelas Infantiles Unidas.

Vuelta a la rutina entre llantos y abrazos

Llantos, reencuentros y comienzos es lo que trae septiembre no solo para los adultos que acaban las vacaciones y vuelven a la rutina, sino también para los más pequeños que comienzan el curso escolar. Las Escuelas Infantiles son las que abren este periodo y dan inicio además, el mundo de la educación para muchos niños. Algunos lo hacen con más ilusión que otros, en el CEI Colorete II, para los más mayores, de dos a tres años, volver a ver a los compañeros y a las seños es una alegría, pero para quienes comienzan esta etapa, aunque se adentran en un lugar lleno de colores brillantes, juegos desconocidos conocen caras que, aunque sonrientes, aún no son familiares. 

Desde tempranas horas, el sonido de pequeños pasos y murmullos llenan la entrada de Colorete II. Algunos niños, agarrados firmemente a la mano de sus padres, avanzan con ojos curiosos, mientras otros, más reticentes, abrazan con fuerza a mamá o papá, como si en ese abrazo pudieran posponer la separación unos minutos más.

Toñi, la dueña del centro, ha estado en la puerta, recibiendo a cada niño con una sonrisa cálida. Su voz suave y tranquila parece tener un efecto mágico, los veteranos la abrazan con cariño y los nuevos extrañan. Sin embargo, el ambiente es acogedor, y eso empieza a suavizar las despedidas. Para muchos padres, dejar a sus pequeños en Colorete II es un acto de confianza, y Toñi, junto al resto del equipo, sabe que hoy más que nunca es crucial transmitir seguridad y cariño: “Este es nuestro 34 curso y me emociona ver como a niños que tuve en su día me traen hoy a sus hijos”, comenta. 

Las aulas están decoradas con murales de animales y formas geométricas en colores vivos. Conchi, una de las educadoras, se dedica al curso de 0-1 año, los más pequeños. Ella no presiona, solo ofrece compañía y estímulos suaves, respetando el ritmo de cada uno: ”Lo que no sería normal es que no les costará trabajo separarse de sus papis. Pero bueno, con música, con cariño y con juegos es más llevadero”, asegura.

Poco a poco, los llantos iniciales se disipan, reemplazados por risas y gritos de emoción. Es un proceso gradual, donde cada niño va encontrando su espacio y su ritmo. El periodo de adaptación está en marcha, y cada pequeño explorador está trazando su propio camino. “Es muy importante realizar este período porque la mayoría no se han separado de la familia y esto les ayuda a saber que hay otros iguales a ellos y que aquí vienen a disfrutar. 

Karen, o la Profe con Ritmo, como se le conoce por la red social TikTok, trabaja en este centro. Es su primer año como tutora de los niños de 2 y 3 años y sus canciones se convierten en un faro de luz para los niños que aún están desconcertados en este primer día. “Siempre digo que hay que partir de las dos formas de enseñanza, tanto la tradicional como la novedosa y Karen nos inyecta esa nueva forma”, relata Toñi, que siente orgullo de que Karen elija la profesión. 

A pesar de que las emociones nublan la realidad en ciertas ocasiones, desde las Escuelas Infantiles resaltan el descenso de la natalidad y cómo esto afecta a los centros: “Estamos notando que vienen menos niños, se nos han quedado plazas libres”, explica Toñi, que achaca este fenómeno no solo a los nacimientos, sino también a la necesidad de la gratuidad. “Tenemos que pedir la ansiada gratuidad que llevan ofreciéndonos muchísimo tiempo, pero todavía no ha llegado. Hay familias en las que es difícil conciliar el gasto de un centro para el niño si no tiene un salario para poder pagar”, reclama.  

Cuando el reloj marca la hora de la salida, los padres regresan, algunos ansiosos por saber cómo fue el día, otros con la expectativa de encontrar a sus hijos tal como los dejaron. Pero en la mayoría de los casos, se encuentran con pequeños cambios. Los niños salen con una mezcla de desesperación y satisfacción, con ‘mono de mamá’ y anécdotas por contar. ¿Cómo se ha portado hoy? -pregunta una madre desde la puerta- "Siendote sincera, regular, me ha revolucionado a la clase entera”, contesta la experimentada seño. 

"Es normal que ellos necesiten unos días, lo raro es que no les cueste despegarse de sus padres", dice Toñi, mientras despide a los padres y niños. "Lo más importante es que todos los años se adaptan bien, incluso los niños con necesidades especiales”, comenta. 

En el Centro de Educación Infantil Colorete II, el primer día de no es solo un evento en el calendario, es un año más de enseñanza, del inicio de una nueva etapa en la vida de estos niños y sus familias. Con risas, algunas lágrimas y mucho cariño, se ha plantado la semilla de lo que serán años de aprendizaje, amistad y crecimiento. Mañana, cuando las puertas se abran de nuevo, los pequeños exploradores estarán un poco más preparados, un poco más seguros y, sobre todo, un poco más emocionados por lo que les espera en esta aventura llamada escuela.