Las casas rurales, un ‘salvavidas’ para el turismo este verano en Málaga

La fase 1 de la desescalada, entre muchas de las actividades que daba a pie, permitía ya el uso y disfrute de los alojamientos rurales. La nueva normalidad que arrancó este pasado lunes 18 mayo significaba un punto de inflexión para el turismo rural de la provincia, los teléfonos de muchos de los propietarios repartidos por toda Málaga volvían a sonar. De la Axarquía a la Serranía pasando por la costa occidental, la provincia está repleta de una gran oferta de casas rurales que prevé que este verano, pese a todo lo acontecido, será un buen verano.

El turismo nacional volverá a copar este verano los alojamientos rurales, tras dos meses de cancelaciones y modificaciones de fechas, cuentan de nuevo con las llamadas, peticiones y reservas de nuevos inquilinos. Carlos Cortés es propietario de cuatro casas rurales entre los municipios de Torrox y Cómpeta que aglutina en su web, micortijoandaluz.com. Su familia lleva más de 20 años en el sector y desde hace tiempo reconoce que los clientes que recibe son más de un 90% internacionales, "el nacional es muy escaso".

"Este año teníamos todo alquilado desde octubre del pasado 2019. Teníamos todo casi lleno", relata Cortés, que asegura que el estado de alarma ha llevado a cancelaciones y modificaciones de fechas para los meses de septiembre y octubre "donde esperan que todo se tranquilice". Al anfitrión le sorprende cómo ha cambiado el perfil de los clientes a raíz del coronavirus: "Ahora estamos recibiendo peticiones nacionales, un turismo que normalmente no nos había hablado. Las fechas canceladas de julio y agosto por el cliente internacional ahora nos las están reservando sevillanos, valencianos y catalanes". Pese al repunte nacional, Cortés asegura que de momento son "más cancelaciones que gente nueva", aunque confía en que haya más movimiento en las próximas semanas cuando se aclare la situación.

Otra propietaria, Raquel, tiene un complejo de casas rurales, La Huerta, a las fueras de capital. Ésta también está notando el repunte de llamadas estos días tras el paso a la fase 1 de Málaga, aunque lamenta las condiciones del avance que la penalizan. Su complejo, compuesto por siete casas independientes, tienen varias zonas comunes, como la piscina, que en este momento tiene prohibido su utilización. "Ahora mismo el perfil que llama es malagueño", reconoce Raquel, pero apunta que la imposibilidad de usar la piscina con estas altas temperaturas no lleva a que confirmen las reservas: "Estamos igual que antes". Pese a ello, visualiza con optimismo los próximos meses.

Toñi tiene una casa rural en Archidona, en Salinas, muy próxima al límite con Granada. Ella está sorprendida por el repunte de llamadas en los últimos días, ya que para ella "p¡ntaba muy mal la cosa este año". La casa de Lú, como se llama su extensa finca, está siendo muy solicitada estos días por inquilinos nacionales y un público "muy joven". La anfitriona reconoce que tenía prácticamente todo reservado este verano antes de la pandemia y que pese a que algunos han aguantado, son muchas las cancelaciones.

"No doy a basto, la gente llama hoy para entrar mañana en la casa", explica y reconoce que tiene el 50% de agosto completo y un tercio de julio ya reservado, siendo bastante halagüeña con la temporada pese a lo mal que lo veía hace un mes: "Me está llamando mucho malagueño, muchos amigos que quieren verse. También gente de toda Andalucía y varios madrileños. La gente está buscando un sitio tranquilo donde verse con sus amigos y familiares y parece que el turismo rural atiende a eso".

En municipios como Júzcar, el alcalde del municipio asegura que las reservas están repuntando en los meses de julio y agosto, los meses fuertes del verano y los que se espera que la desescalada haya culminado con éxito. El carácter cultural de la localidad con el rodaje hace años de películas de Los Pitufos reforzó en los últimos años la presencia de turistas.

Dos tercios de los alojamientos ya cubiertos

Toda la provincia tiene una amplia oferta de casas rurales. Portales web que aglutinan la oferta malacitana de este sector cifra su número en unas 600 alojamientos. Las reservas en estos últimos dos meses han sido nulas pero el turista nacional ya comienza a pensar en pequeñas escapadas a medio plazo. En los meses fuertes de verano, julio y agosto, se espera un alto repunte en este sector. De hecho, a día de hoy ya existe una ocupación en Málaga de más de dos tercios para estas fechas en puntos claves como los fines de semana, centrando como momentos claves la última semana de julio y las dos primeras de agosto, donde la ocupación supera el 70% en este caso.

Pese a ello, la oferta en estas fechas sigue siendo amplia, de en torno a 200 casas rurales. El mes de junio, según algunos de los anfitriones contactados, se espera que sea el mes que refuerce al cliente para contratar sus servicios y salvar los meses de julio y agosto, cuando las fases de la desescalada concluyan y se entre de lleno en esa nueva normalidad. También destacan que el turista nacional no es como el extranjero ya que "suelen esperar a última hora para planear sus vacaciones y realizar reservas".

Andalucía, la comunidad con mayor ocupación

La web escapadarural.com analiza los datos que refleja su portal de reservas de casas rurales en toda España y pone el foco en Andalucía como la comunidad autónoma con mayor porcentaje de ocupación en estos momentos de toda la península con un 39%, le sigue Murcia con un 38% y Cataluña y Navarra con un 35%. De hecho,

El avance en la desescalada y el paso adelante con las fases en las determinadas autonomías está llevando a los turistas, principalmente nacional, a un incremento del interés y las llamadas en el turismo rural para este verano. Así se entiende, en parte, el fuerte incremento de contactos con posibles destinos de los usuarios de la mencionada entre el 15 y 19 de este mes de mayo con respecto a los mismos días del pasado 2019. El incremento más fuerte se ha dado en Madrid (295%), Murcia (223%) y Andalucía (211%).