El Cercanías de Málaga a Fuengirola va al 117% de su capacidad en verano

Que el Cercanías de Málaga a Fuengirola va por encima de su capacidad es una evidencia a poco que te asomes en hora punta o verano. Pero también es una realidad constatada negro sobre blanco por el Ministerio de Transportes, que avisa de que tiene "problemas de capacidad, especialmente en verano", cuando circula al 117% de esta. Aunque la relación volumen/capacidad no sólo crece en época estival y se mantiene "alta" durante todo el año.

De esta manera se constata en el informe Movilidad en el litoral de la Costa del Sol y Análisis de previabilidad de la extensión ferroviaria hasta Algeciras y Nerja, rubricado por el director general de Estrategias de la Movilidad de la Secretaría, dependiente del Ministerio, José Alfonso Gálvez Salinas, y al que ha tenido acceso Málaga Hoy. Este, junto a otros documentos, fue analizado en la reunión del pasado 28 de noviembre que sentó a representantes de Gobierno central, Junta de Andalucía, Diputación y ayuntamientos de la zona en dos mesas técnicas.

No es ninguna sorpresa, a tenor de que en 2023 movió a 13,2 millones de pasajeros y teniendo en cuenta que Adif, en el documento para justificar el desdoblamiento de la línea entre Campamento Benítez y el Aeropuerto, ya avisaba de que en el último trimestre de 2022 se alcanzó una media de aprovechamiento del 80%, es decir, el tren estuvo ocupado de media en más de tres cuartas partes de su capacidad total.

Este desdoblamiento, en el que ya está trabajando el Ministerio y se prolongará tres años, no será suficiente por si mismo para reducir el tiempo de paso entre tren y tren por sí misma y, de esta manera, poder poner más trenes en circulación, lo que aliviaría la sobre explotación de los convoyes actuales. Así se certifica en el mismo informe de Adif, que recoge que "ejecutando únicamente esta duplicación, se prevé que no se pueda aumentar la frecuencia actual. Para ello habría que duplicar conjuntamente otros tramos de la línea".

Para lo que sí servirá, si no se avanzase un centímetro más de esos casi tres kilómetros en el desdoble de la vía, siempre según el citado documento, es para "absorber los posibles retrasos" y dotar de más estabilidad a la línea. Pero, en el informe ministerial, señalan, justamente, la dificultad de desdoblar parte de la línea que ahora discurre en vía única, por encontrarse en el entorno urbano.

Actualmente, la línea va duplicada en 17 kilómetros, algo menos de dos tercios de los 30 que cubre en su totalidad entre la capital y Fuengirola. El Gobierno apunta a "problemas técnicos para duplicar por entorno muy urbano". Para que el número de trenes que pasan por las vías malagueñas crezca un 33% y se reduzca ese tiempo de paso, es necesario, además de duplicar el tramo entre Campamento Benítez y el aeropuerto –que pasa por Plaza Mayor y crea un segundo andén al que ya existe en el proyecto que ya se está ejecutando–, necesita desdoblar otros dos tramos.

El primero de ellos cubre 1,88 kilómetros entre las estaciones de Torremolinos y El Pinillo. El segundo de ellos, más extenso, cubriría 2,55 kilómetros y discurriría entre El Pinillo y Torremuelle, pasando parte de su recorrido en túnel y abarcando la estación de Benamádena que debería hacer crecer, a su vez, el andén para poder acoger a trenes de mayor capacidad.

Si la línea C-1 superó los 13,2 millones de viajeros en el año pasado, entre esta y la C-2, la que va a Álora, se alcanzaron los 16 millones de pasajeros, siendo la red más importante de Andalucía. Sin embargo, la línea norte "no tiene una carga relevante" y cuenta con "una baja cobertura de población, al encontrarse las estaciones lejos de algunos núcleos tradicionales", es decir, Cártama, Álora y Pizarra.

Trenes de doble altura

Para aligerar esta congestión, además de aumentar las frecuencias y poner trenes en doble composición, también se plantea la posibilidad de crecer en altura. Es decir, traer a Málaga trenes de dos niveles.

Así lo expresó José Antonio Santonio, secretario de Estado, en respuesta al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, que apuntó en esa dirección, asegurando que ya se usa en otros puntos de España, como una solución posible a la necesidad de un aumento de capacidad en los trenes de Cercanías, siempre, claro, a la espera del tren litoral.

“Es una opción, pero se necesitan trenes que no tenemos todavía. Renfe ha hecho una compra histórica de más de 400 trenes que empezarán a llegar a finales de 2025. Y entre ellos los hay de doble altura. Paciencia, porque este Ministerio está haciendo sus deberes”, afirmó.

Sin embargo, esta no fue la única propuesta efectuada por el alcalde para mejorar el Cercanías C1 que, recordó, “está saturado”. También puso sobre la mesa “la posibilidad de alargar la estación para que los trenes sean más potentes en cuanto al público que pueden mover”, unos trabajos que darían cierto respiro al que, recordó, “hoy por hoy es el menos costoso o más rentable de toda España”. “Eso es una realidad que está ahí, con una ocupación altísima”. Por lo tanto, incidió, esto “sería la primerísima fase, que ni siquiera hay que esperar a que el estudio se haga”, porque “ya se sabe que hay una necesidad de mejorar el C1, que está en paralelo a los estudios que se hagan para estas ampliaciones hacia Algeciras y Nerja”.

El tren litoral tendría 60 millones de viajeros

Según el mismo estudio, la prolongación de la conexión ferroviaria desde Nerja hasta Algeciras tendría una gran acogida en términos de pasajeros. O, al menos, eso es lo que reflejan los datos iniciales que baraja el Ministerio de Transporte para sacar adelante el ansiado tren litoral. Así, a la espera de la publicación del estudio de viabilidad anunciado por este departamento, se calcula que la demanda potencial sería de unos 60 millones de viajeros anuales siempre y cuando se sumen los cuatro tramos que los técnicos tienen sobre la mesa. Estos serían: Nerja-Málaga (26.763 al día y, por tanto, 9.768.495 al año), Málaga-Fuengirola (25.565.695), Fuengirola-Estepona (20.299.475), y Estepona-Algeciras (4.886.255).

Por tramos, el Nerja-Málaga, con una población estimada de 774.000 personas, salvaría una longitud de 52 kilómetros; para esta zona también se cifran más de 150.523 viajes al día de más de cinco kilómetros a través de diferentes medios de transporte, de los que el estudio estima que se podría captar como usuarios del tren al 18%, es decir, a 26.763 cada día. Además, dentro de la horquilla 2.000 - 20.000 que fija el número máximo de pasajeros que pueden llegar a coincidir en hora de máxima demanda, se estima que estos se quedarán por debajo del mínimo inferior, en 1.927.