La concienciación sobre la salud mental aumenta la demanda del grado de Psicología en Málaga

Málaga/En un edificio blanco recién estrenado, de arquitectura sugerente y espaciosa, con una potente luminosidad natural, con tabiques de cristal y detalles en hormigón, los más de 2.000 alumnos de la Facultad de Psicología y Logopedia de la Universidad de Málaga se preparan junto a 230 profesores para servir a la sociedad en la ardua tarea de mantener y mejorar la salud mental.

Estos estudios, principalmente Psicología, están muy demandados entre el estudiantado malagueño. En un 10,999 se ha quedado la nota de corte para entrar en la UMA y hay 402 aspirantes en lista de espera. Sin embargo, las salidas laborales no son lo buenas que cabría esperar, a pesar de su amplísimo campo de acción. En la sanidad pública española la ratio de psicólogos es de 6 por cada 100.000 habitantes, tres veces menos que la media europea. Y esto en unos momentos en los que se producen once suicidios al día en el territorio nacional.

“Tenemos 275 plazas en Psicología y todos los años se quedan alumnos fuera, hay mucha demanda y muchas salidas profesionales, en el ámbito sanitario, en los servicios sociales, las empresas, los ayuntamientos, el ámbito jurídico, educativo, deportivo… Pero es necesaria una mayor apuesta de las instituciones públicas por el cuidado de la salud mental, hacen falta muchas más plazas de psicólogos en todos los ámbitos ”, considera Maribel Hombrados, decana de la facultad.

“La salud mental se tiene que tratar como cualquier otro problema, no puede ser un privilegio, es un derecho y es cuestión de equidad y justicia social, debe de ser universal y para todos”, agrega la decana. No obstante, la ratio en la atención primaria es tan pequeña que la población más desfavorecida tiene menos acceso a estos cuidados.

“Se ha ganado la primera batalla, la de la concienciación, ya existe una preocupación por la salud mental y su cuidado es seña de identidad de una sociedad avanzada”, dice Hombrados. Pero en España las listas de espera es muy grande y “la mayoría busca ayuda de forma privada porque no puedes estar esperando meses a una primera cita”, agrega Juan Manuel Domínguez, vicedecano de Igualdad y Diversidad del centro.

Con esta situación de partida se nos enfrentamos “a la próxima pandemia, según dicen los expertos, están aumentando los suicidios, los casos de depresión y ansiedad, tienen que incrementar los recursos en tratamiento y también en prevención, en el ámbito escolar, en el familiar, dentro de los colectivos más vulnerables”, considera la decana. También señala que “estamos viviendo un momento social muy complicado, unas perspectivas laborales difíciles y, entre los jóvenes, hay bastante angustia ante el futuro”.

La profesora Carmen Lledó destaca, además, el “aislamiento” que sufre la población joven. “Las redes sociales dan una falsa sensación de comunidad, la gestión de las relaciones humanas en un ámbito virtual no crea lazos sólidos, tienen un déficit en el aprendizaje de solucionar problemas reales, eso crea falta de habilidades y ansiedad”, asegura Lledó.

La facultad, que ha inaugurado este curso su nueva sede en la ampliación del Campus de Teatinos, cuenta con dos grados y cuatro másteres oficiales, además de títulos propios. El próximo año quieren poner en marcha el doble grado de Psicología y Logopedia. En Logopedia cuentan con 80 plazas y se trata de un grado habilitante, por lo que la salida laboral es inmediata nada más titular. “El nivel de inserción es muy alto”, apunta la decana. En esta carrera el número de corte se ha quedado en 7,8 y 43 personas en lista de espera.

En Psicología hay que hacer el máster de Psicología General Sanitaria para poder ejercer en este sector, por lo que muchos de los egresados continúan con su formación. Dentro del grado hay diferentes itinerarios formativos, psicología clínica, educativa e intervención social.

“Los graduados en Logopedia se incorporan al trabajo prácticamente cuando salen de estudiar, en Psicología el acceso es más tardío, necesitan más especialización, porque hay mucha demanda de especialistas pero no esa oferta que debería de haber”, detalla Hombrados. Esto supone, dicen, que se medique más a los pacientes porque no hay posibilidad de hacer terapia. Por eso, reiteran que estos profesionales tendrían que estar presentes en los centros de atención primaria en igualdad de condiciones que otras especialidades.

El nuevo edificio

Quince años ha tardado en levantarse la nueva Facultad de Psicología y Logopedia, porque el proyecto ya existía en 2007. El pasado 4 de julio comenzó la mudanza y el 1 de septiembre ya estaba abierto al público el edificio. Cuenta con 24 aulas, algunas de ellas se pueden unir para dar cabida a un centenar de alumnos, 30 laboratorios para la investigación, una biblioteca con 152 puestos de lectura, salas de trabajo en grupo, salón de grados y salón de actos, sala de ordenadores, la futura cafetería y un buen número de espacios comunes y patios para las reuniones fuera de clase.

Wifi en todo el edificio, mesas electrificadas para poder cargar los dispositivos y un especial cuidado por romper cualquier barrera arquitectónica son también características del edificio diseñado por el estudio LLPS Arquitectos. Inspirada en las alcazabas musulmanas, las ventanas son pequeñas y escasas, pero la luz entra a raudales por los patios interiores a cielo abierto. El ladrillo se ha sustituido en gran parte por cristal, así que la actividad docente o administrativa está expuesta, aunque perfectamente insonorizada.

“Los espacios hay que vivirlos para darnos cuenta de lo que es mejorable, estamos viendo las necesidades de estudiantes y profesorado y realizando adaptaciones para alumnos con diversidad funcional”, detalla Hombrados. “Ya tenemos la facultad llena, no sé cómo hemos podido convivir tantos años con otros 4.000 alumnos de la Facultad de Educación, estábamos hacinados”, comentan.

Semana diversa

La Facultad de Psicología y Logopedia cuenta con unos presupuestos participativos y, dentro de estos, ha sido el propio alumnado el que ha decidido sobre qué campos les interesaba recibir información teórica y práctica. De esas propuestas nació la Semana diversa, en la que se han llevado a cabo talleres con profesionales de distintos ámbitos para profundizar en la diversidad funcional y afectivo sexual, como explica el vicedecano Juan Manuel Domínguez. Entre las actividades también se inauguró el mural de la diversidad. Al margen de esta semana, la Facultad también fue sede de las Primeras Jornadas Trans Internacionales, que estuvieron abiertas a toda la comunidad universitaria.

Guía para el Profesorado Novel

Uno de los proyectos que acaba de ver la luz es la Guía para el Profesorado Novel, un documento que sirve de referencia para todo aquel que se incorpora a la docencia. Las profesoras Rocío de la Vega y Carmen Lledó han sido las responsables. “Cuando vienes a trabajar como docente hay unos requisitos, una estructura, que tienes que conocer, muchos detalles que saber de un día para otro y queríamos acompañar a los profesionales noveles con una guía que formara parte de ese proceso de socialización”, indican las profesoras. Y subrayan que este documento puede ayudar a “mejorar la calidad de la docencia y disminuir el estrés”.

Aunque está concebida para la Facultad de Psicología y Logopedia, también tiene apartados comunes, como el campus virtual, que pueden servir de ayuda a cualquier docente de la UMA. Han colaborado todos los departamentos para recoger el abanico más amplio posible de necesidades y dar respuesta a ellas. La guía cuenta, igualmente, un capítulo dedicado a la investigación.