Crece el malestar de los usuarios de los centros de salud de Málaga: “Esto es venir a echar la mañana”
Las colas son reincidentes y las citas se dan mínimo tres días después de su solicitud
En las filas ante el mostrador se repiten las palabras "indignación" y "soluciones"
Quejas en las colas de los centros de salud de Málaga: "Llevo llamando tres días para renovar la medicación y solo me marean"
En los mismos puntos, a las mismas horas y con las mismas colas se encuentran los centros de salud de Cruz de Humilladero, Huelin y Puerta Blanca de Málaga, sólo el reflejo de lo que está pasando en todala provincia, donde se hace días se repiten las filas de usuarios en sus puertas para pedir una cita con el médico de cabecera. El malestar aumenta y la espera "indigna": "Ahora esto es venir a echar la mañana", asegura un hombre mientras espera su turno.
Ana Peña, de 56 años y vecina del barrio de Huelin, no está esperando cita para ella, sino para su hija: "Ella está trabajando y me dijo mamá hazme el favor. Tiene que pedirse una baja, pero primero tiene que verla el médico". Explica que lleva una media hora haciendo cola y cree que "solo habrán entrado siete personas. Viendo lo visto aprovecharé y pediré también para mi marido". Ana no ha probado a coger cita a través de canales externos como Salud Responde porque explica que "nunca la he necesitado, siempre he venido y sin problema".
En Cruz de Humilladero son una veintena de personas las que se pueden contar únicamente en la puerta. Dentro del centro de salud y hasta llegar a los mostradores de administración el número aumenta. "Estoy esperando cola para mi hermana que viendo que no avanzaba rápido se ha ido a comprar el pan. Yo le he dicho que viene a perder el tiempo, porque no va a conseguir cita para hoy", reclama Elena, que comenta que está pensando en cambiarse de centro de salud, "si fuese posible".
Resignados, surgen las conversaciones y discusiones en la fila: "Si al menos la cola mereciera la pena, pero la mitad de la gente que hay aquí no va a verla un médico hoy ni mañana", comentan dos jubilados que se apoyan a la sombra de la pared para evitar el sol de la mañana en Cruz de Humilladero.
Victoria y Juan acuden al centro de salud con su bebé porque tiene cólicos desde anoche, han intentado entrar a urgencias, pero sin número no le atienden: "Ahora mismo está dormido porque acaba de comer, si está despierto está llorando", explica ella, que sostiene al pequeño en brazos. Han tenido la suerte de que otra persona que estaba en la cola le ha cedido su sitio porque ha decidido marcharse tras mirar el reloj en varias ocasiones.
Una vecina de Puerta Blanca reclama que tiene a un familiar de 97 años a su cargo con una cadera fracturada y no ha conseguido obtener la medicación: “Desde las 10:30 estoy aquí, son casi las 12:00 y ahora es cuando termino. Resulta que cuando he entrado me han dicho que no puede ser hasta la semana que viene y ahora, esta semana ¡qué le doy!", exclama cabreada. Explica que hace un tiempo ella misma sufrió un ictus y no se encuentra en condiciones de salud adecuadas: "Otro día vine y me caí y me tuvieron que dar nueve puntos, no puedo aguantar tanto tiempo y menos con el calor”, concluye.
Algunos llegan antes de que el centro abra, con la esperanza de ser de los primeros en conseguir una cita para Atención Primaria. En Puerta Blanca, los que están saliendo una vez han obtenido su consulta, apuntan que después de dos horas es cuando parece que está avanzando porque a primera hora de la mañana llegaba hasta fuera del recinto: “No sé yo si es mejor venirse a las 8:00 o a las 12:00”, comenta una mujerque se marcha guardando el papel en el que se indica la cita.
Diferentes testimonios con una misma queja desde la semana pasada. Carmen, madre de dos niños, expresa su "desesperación" al intentar obtener una cita para su hija pequeña: “No he conseguido cita en su pediatra y ahora que ha salido del colegio hemos venido a ver si la pueden ver". Acaba de salir y comenta que le han dado cita para el siguiente lunes: "¿Y mientras qué hago? No podemos estar en urgencias por todo, y no pueden estar faltando al colegio", comenta resignada.
Las opiniones son tajantes y piden una respuesta y solución: "Los que piensen que es mejor no venir se están equivocando, lo que hay que hacer es venir porque la salud es muy importante", comenta Luis, que se vio obligado a prejubilarse por problemas cardiovasculares: "Las personas que tenemos enfermedades graves deberíamos tener unas citas aseguradas durante todo el año y cancelarlas con tiempo si no podemos ir".
Desde el Sindicato Médico de Málaga, la delegada de atención primaria, María Ángeles Bernal, prevé que la incorporación de personal que habrá con los traslados y el concurso de méritos a partir de la segunda quincena del mes: "Hará que mejore la situación", asegura. Apunta así lo que es ya una realidad: "Desgraciadamente, parece que la gente lo está asumiendo y por eso es tan importante que desde la consejería tengan en cuenta el problema del relevo generacional y el aumento de las jubilaciones". El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ya reconoció el problema al autorizar para la provincia la creación de 83 nuevos puestos: 74 facultativos de familia y nueve pediatras aumento y aseguró la semana pasada que se trataba de un problema puntual.
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