Un policía destroza cuatro taquillas de compañeros en el cuartel de La Corta

Un policía local de Málaga supuestamente ha destrozado las taquillas de cuatro compañeros. Internamente, los hechos han sido sancionados como falta leve, aunque el castigo ha quedado en suspenso tras la intervención de un juzgado que investiga lo sucedido. Todo ocurrió el pasado 6 de marzo dentro de las dependencias de la Jefatura Norte, ubicada junto a La Corta. Según el Sindicato Independiente de Andalucía (Sip-An), cuatro taquillas de policías locales aparecieron destrozadas. Otra fuente apuntó que era solo una. Aparentemente, habían sido golpeadas por la defensa que los agentes tiene como dotación.

El Sip-An precisó que una de las taquillas estaba forzada, habían registrado su interior y detonado un artefacto explosivo dentro. Las cuatro taquillas pertenecen a agentes afiliados al Sip-An. Ante lo ocurrido, el policía cuya taquilla fue forzada interpuso una denuncia en la Policía Nacional. La Jefatura de la Policía Local, por su parte, inició una investigación interna que concluyó con la identificación del presunto responsable del incidente. Se trata de un agente al que se le aplicó una sanción por falta leve, que según el reglamento supone la suspensión de hasta cuatro días. Sin embargo, este castigo ha quedado en suspenso debido a la intervención de un juzgado de la capital como consecuencia de la denuncia interpuesta ante el Cuerpo Nacional de Policía.

La Policía Local ha remitido la información del expediente requerida por el juez y el magistrado ya ha tomado declaración al agente cuya taquilla apareció forzada. Para el Sip-An, la sanción interna que se ha dispuesto contra el presunto autor de los hechos es insuficiente: "Cual es nuestra sorpresa cuando observamos que el instructor de la investigación cataloga el destrozar cuatro taquillas, registrar una de ellas y detonar un artefacto explosivo en su interior como falta leve al reglamento".

Según la organización sindical, "esta falta de contundencia por parte de los dirigentes de la Policía Local ha desembocado en otras acciones de igual gravedad contra el policía que denunció". El sindicato asegura que el agente afectado está recibiendo notas de coacciones "que podrían ser consideradas en su conjunto como acoso laboral de persistir en el tiempo" y "la Administración no está poniendo los medios necesarios" para evitarlo.

Otras fuentes policiales quitaron ayer hierro al asunto y lo explicaron como una "enemistad personal". Sin embargo, el Sip-An asegura que el policía al que le forzaron la taquilla "casi no ha tenido contacto" con el presunto autor de los hechos. En todo caso, la resolución de este incidente depende ahora de lo que resuelva el juzgado que investiga lo sucedido.