Empresarios de la noche de Málaga informarán al personal de cómo actuar ante un caso de sumisión química

Málaga/Una moda de la que intentar escapar. La sumisión química con pinchazosLa sumisión química conpinchazos. Una realidad que para cientos de mujeres jóvenes y no tan jóvenes desata el pánico. Ante un posible caso denunciado por una turista francesa de 22 años, los empresarios de la noche malagueña aseguran que todos los trabajadores estarán completamente informados del protocolo a seguir en caso de que esto sucediera en sus locales. "Queremos transmitir seguridad, confianza y prevenir ante cualquier emergencia y sobre todo, nunca dejar sola a la persona", afirma Juan Rambla, Presidente de Andalucía de Noche.

Robles relata que "no debemos alarmarnos" y que desde los establecimientos de la noche malagueña se intentará informar de cualquier precaución. El protocolo a seguir será el siguiente, a partir del momento del pinchazo y de que la victima avise a seguridad o a la persona que tenga al lado, se procede a una atención absoluta, "se le acompañará y atenderá en todo momento hasta que acuda la policía al local", explica Robles.

La sumisión química es algo que ya existía desde hace años. No ha cambiado, pero si ha empeorado. Los pinchazos son una administración con efectos psicoactivos que deja inconsciente a la victima. Los perfiles más afectados son jóvenes y mujeres que utilizan para cometer delitos de carácter sexual o ancianos con el fin de cometer un delito de índole económica, es decir, robos o engaños.

La sumisión química se da cuando a una víctima le echan sin su consentimiento una sustancia que altera su nivel de conciencia y anula su voluntad, en la mayoría de los casos por alcohol. Este tipo de sumisión empleado por agresores sexuales desde antes de la pandemia, llegó a España este año, aunque lleva tiempo presente en otros países de la Unión Europea.

Cataluña es la Comunidad con más casos de España, si bien el país ya contabiliza 162 casos de abusos sexuales perpetrados mediante sumisión química de un total de 9.331 agresiones. Por lo general, esta sustancia aparece combinada con otras, normalmente con alcohol. Nogales enumera: opiodes, burundanga, benzodiazepinas, éxtasis líquido y las principales causas son náuseas, somnolencia, dolor de cabeza, lagunas y aturdimiento. Éstas, al ser absorbidas por el torrente sanguíneo, actúan sobre el sistema nervioso central alterando el nivel de conciencia y anulando la voluntad.

Según datos del Clínico, se han atendido 12 agresiones sexuales a mujeres en el hospital desde enero hasta junio de este año. Cinco de ellas -casi la mitad- con sumisión química. Estas víctimas tenían entre 20 y 45 años. Ocho eran españolas y el resto extranjeras. Además, en ese periodo el hospital ha atendido a otros 4 pacientes que también han sufrido sumisión química, generalmente para robarles.

Se trata de denuncias recopiladas desde el pasado 11 de julio; por ahora ninguna está vinculada con una violación o un robo y tampoco se ha podido determinar si las víctimas han sido drogadas. La concejala de fiestas Teresa Porras, ha asegurado que se extremará la precaución de cara a la Feria de Málaga, la semana que viene confirmará los procedimientos que se van a tomar.

En el Clínico se le toman muestras de sangre, orina y pelo. Las sustancias usadas para la sumisión química tienen un tiempo muy dispar para desaparecer del organismo. En sangre y en orina sus efectos se pierden en poco tiempo; mientras que en el pelo pueden permanecer varias semanas. En el hospital, las víctimas son atendidas por ginecólogos si son mujeres y por cirujano en el caso de los varones. Además, se les hacen los test de embarazo y enfermedades de transmisión sexual, a la vez que se les administra la profilaxis contra el VIH.

Por otro lado, Irene Motero publicó en Twitter que la semana pasada, en el momento que fueron conocedores de esto hechos, el Ministerio de Igualdad ha firmado un convenio con la Federación Nacional de Empresarios de Ocio y Espectáculo para que los lugares de ocio sean también puntos violetas.

¿Qué se debe hacer ante un caso de agresión?

1. Lo primero de todo es avisar a las personas de tu alrededor para que puedan ayudarte y personal del propio establecimiento o discoteca.
2. Avisa a la policía. La seguridad del establecimiento debe ayudarte en todo momento.
3. Acude cuanto antes al hospital más cercano, son sustancias que desaparecen muy rápido del organismo y lo correcto es hacer pruebas lo antes posible.
4. En el momento que estés en el centro sanitario se activará el protocolo de "pinchazo occidental" y se evaluará la necesidad de suministrar la profilaxis poseexposición al VIH, que debería tener lugar durante las primeras 72 horas.
5. Por último es informar a las autoridades de lo ocurrido para posteriormente formular una denuncia.