Dos empresas presentan al Puerto planes para un hotel de hasta 450 habitaciones

El año que acaba de arrancar se antoja crucial para poner las bases de uno de los proyectos más ambiciosos de cuantos hoy tiene sobre la mesa el Puerto de Málaga: el hotel en el dique de Levante. Tras varios años de análisis y estudios varios, el presidente de la institución portuaria, Paulino Plata, confía en que sea posible a lo largo de los próximos doce meses impulsar el concurso público mediante el que contratar el proyecto, la construcción y la explotación de un recinto que, en caso de prosperar, situaría al de la capital de la Costa del Sol como el tercer puerto español con un uso de este tipo. Los otros dos son Barcelona, con el Hotel Vela, diseñado por Ricardo Bofill, y Alicante.

Plata, que subraya la "complejidad" de una tramitación que requiere de la autorización del Consejo de Ministros, incidió en que hasta la fecha son varias las cadenas hoteleras e inversores que se ha interesado por esta iniciativa, buena parte de ellas extranjeras, aunque también con algún grupo nacional. En concreto, aludió a la existencia de cinco compañías que han preguntado por la propuesta, si bien admitió que dos son las que "llevan más avanzados los trabajos".

"Con maquetas incluso", añadió, confesando que algunas de las actuaciones "tienen, ciertamente, atractivo". A este respecto, cabe recordar que a lo largo del pasado mes de septiembre un grupo inversor procedente del Golfo Pérsico estuvo reunido con Plata para abordar este asunto. Al interés mostrado por este se puede sumar al que meses atrás también expusieron otro de nacionalidad rusa y otro español.

Preguntado por las características de estos diseños iniciales, explicó que el planteamiento es el de levantar una construcción de unos 40.000 metros cuadrados de techo edificable, lo que traducido en habitaciones suponen "entre 400 y 450". Habitáculos que formarían parte de un establecimiento de cinco estrellas, "con salones y todas las instalaciones necesarias para acoger a un sector que en Málaga aún no hay", y con una inversión que Plata da por seguro superaría los 70 millones. No obstante, el valor real de esta construcción dependerá muy mucho de las características del edificio, en especial, por las particulares condiciones del suelo sobre el que se asentaría, ganado al mar.

Una de las novedades que favorece el impulso de esta iniciativa es la modificación de la Ley de Puertos que permite ampliar a 50 años las concesiones en estos espacios. De ello se beneficiaría el concurso del hotel, que incluiría la posibilidad de ampliar otros 25 años la gestión. El terreno elegido se encuentra localizado junto a las estaciones de cruceros, cuyo uso acaba de ser aprobado por el Consejo de la Autoridad Portuaria tras aprobar su delimitación y la ampliación de la misma, con el fin de que "sea más cuadrada". En concreto, se trata de una pastilla de algo menos de 18.000 metros cuadrados. Ello supone agregar unos 4.000 metros más a la delimitación inicial.

Las características hoteleras para las que se contempla el potencial establecimiento del Puerto tendrán parcialmente una respuesta con la apertura, previsiblemente en 2016, del hotel Miramar, impulsado por Grupo Santos en el Palacio Miramar.

"Es necesario un trámite en el que hay muchos asuntos por resolver; espero que quede resuelto más bien a finales de 2015 o principios de 2016, aunque la idea es que el concurso pueda salir antes", expuso a Málaga Hoy. En este sentido, y con el fin de allanar el camino, se quieren tomar en cuenta las experiencias ya conocidas en Barcelona y Alicante con propuestas hoteleras en espacio portuario.

Uno de los aspectos a destacar es que, según detalló Plata, las propuestas más avanzadas no prevén un uso complementario como el del casino. Un equipamiento de ocio que, según un estudio encargado por el Puerto tiempo atrás a la consultora Instituto de Análisis Inmobiliario, podía resultar clave para garantizar la viabilidad comercial del proyecto. A este elemento, el trabajo añadía el valor de contar con una "firma" relevante desde el punto de vista arquitectónico para el diseño del inmueble.

El informe, de 64 páginas, subrayaba el valor de considerar "que el proyecto se fundamenta en la peculiaridad del edificio, su carácter único en la ciudad y la capacidad representativa en el ámbito internacional para atraer personas y eventos del más alto nivel". Los números expuestos, sobre el planteamiento del primer año de funcionamiento, indicaban el hotel-rascacielos permitiría un beneficio neto de 19,9 millones de euros en el caso de un hotel de cinco estrellas y de 9,1 millones si se optase por las cuatro.