Un "error de mecanización" con intereses

Conseguir una beca universitaria en un contexto en el que la crisis económica se extiende a todos los estratos de la sociedad es cada vez más difícil. Al mismo tiempo que aumentan las tasas universitarias, asciende el número de estudiantes que ponen fin a sus estudios por no percibir ningún tipo de ayuda económica. Sin embargo, que Almudena se haya quedado sin beca y tenga que poner fin a su carrera es un caso diferente.

Esta joven malagueña de 22 años estudia Traducción e Interpretación en la Universidad de Córdoba. El próximo año realizará su cuarto curso, aunque con todo lo que ha sucedido, mantiene la duda de si podrá o no continuar estudiando. Desde que empezó 1º de Bachillerato ha sido becaria y ha percibido lo máximo a lo que un estudiante puede acceder porque cumple con todos los requisitos familiares y de renta necesarios. "Pertenezco a una familia monoparental porque no tengo padre, mi madre es limpiadora y no tiene un sueldo suficiente como para ayudarme también a mí con mi formación, y además, tenemos a una persona con discapacidad mental a nuestro cargo" cuenta Almudena.

Por ello, desde que ingresó en la Universidad de Córdoba para cumplir su sueño, ejercer de traductora y sacar partido a la pasión que siente por los idiomas, ha recibido ayuda económica del Ministerio de Educación, más el pago automático de la matrícula. El pasado septiembre una vez más reclamó la ayuda, y como siempre, en diciembre le notificaron que estaba aprobada y que por tanto, para el curso 2012-2013 tendría la beca. La subvención, de 3.650 euros, no llegó hasta finales de marzo.

Todo transcurrió con normalidad hasta que en junio Almudena recibió una carta certificada de su universidad en la que en tan sólo dos párrafos le notificaban que había recibido la beca por un "error de mecanización" y que tiene que devolver la totalidad del importe. Sólo recibe un folio donde le dicen que tiene que reembolsar la ayuda junto a tres documentos que rellenaría el banco en el momento del pago. Ni una explicación de quién, cómo y porqué se comete ese error. Pero esto no es todo, ya que a los dos días la universidad se pone en contacto con ella para confirmarle que al no ser becaria, tiene que pagar la matrícula si quiere seguir estudiando el año que viene. "De repente, mire donde mire me encuentro algún problema, y lo peor de todo es que ni encuentro solución ni me ayudan a solucionarlo" subraya Almudena.

Tras dos días de llamadas tanto al ministerio como a la universidad, consiguió que le explicaran cómo se había podido producir este "error de mecanización". "Supuestamente, yo no tendría que haber recibido esa beca porque mi nota, que tras los cambios del ministro Wert exigen un 6.5, no llegaba a la media estipulada. Por tanto, en diciembre me lo tendrían que haber comunicado, no lo hicieron y además me ingresaron el dinero. Pero además, desde el departamento de becas de la universidad me dicen que yo no soy la única, sino que somos un grupo de estudiantes los que estamos en esta situación: tener que devolver una ayuda que nos dan por un error de los de arriba y ahora nos toca pagar sin posibilidad de alegar". Y es que según afirma Almudena, la universidad le instó a no realizar queja o alegación alguna, "ya que tenían órdenes directas de no contestar ni solucionar ninguna reclamación que tuviese que ver con estas subvenciones". Este periódico se puso en contacto con la universidad para conocer su versión, pero no hubo respuesta.

Aun así, su indignación no nace ante la imposibilidad de devolver la beca y la matrícula, sino que además tiene que pagar con intereses. "La universidad me permite un plazo de pago hasta el 11 de septiembre, sin posibilidad de fraccionar la cantidad. Si llega esa fecha y no pago, me mandarían una segunda notificación. Si todavía en esta fecha no he ingresado el dinero, mi caso pasaría a manos del Ministerio de Hacienda, dónde sí me permitirían pagar a plazos pero con unos intereses que elevarían notablemente la deuda".

Almudena necesita ayuda, y sobre todo "que alguien la escuche". Quiere pagar su deuda porque entiende que no merece ese dinero al no cumplir con los requisitos establecidos. Pero lo que no que no comprende, es que en un contexto de recortes en el que los estudiantes sufren medidas a golpe de tijera, tenga que poner punto y final a su carrera por un error.