Una fuente inspirada en Picasso para embellecer la Plaza de la Solidaridad en Málaga

Málaga/Una de las primeras decisiones adoptadas por el nuevo equipo de la Consejería de Fomento al poco de tomar las riendas fue la retirada de la maquinaria del Metro de la glorieta de la Plaza de la Solidaridad. Ese simple movimiento hizo posible una cierta normalización en la imagen que venía arrastrando este punto de la obra, convertido en una especie de almacén de material. Ahora, el departamento dirigido por la consejera Marifrán Carazo pretende dar un paso más en el objetivo de embellecer el emplazamiento.

Para ello, según pudo saber Málaga Hoy, se mantienen conversaciones con la Gerencia de Urbanismo para, en un breve plazo de tiempo, licitar los trabajos que permitirán ajardinar la rotonda y levantar una fuente en la que, de manera simbólica, se representará una alegoría de Las Bañistas, pintura de Pablo Ruiz Picasso. La envergadura de la actuación queda reflejada en el presupuesto de ejecución material manejado de inicio: 385.000 euros.

La intervención va en la línea del deseo de Fomento por rebajar la afección de la obra en superficie del Metro en un tramo de la ciudad largamente afectado por los trabajos del ferrocarril urbano. Sirva de referencia que el arranque oficial de las obras en el tajo Renfe-Guadalmedina tuvo lugar a principios de 2010. Más de nueve años después de aquel hito, la ejecución de la infraestructura sigue sin estar completada. De un lado, las máquinas avanzan en la excavación del túnel en la parte de Callejones del Perchel, vía que fue repuesta años atrás; de otro, tras la finalización de los muros pantalla en el subtramo de la Avenida de Andalucía, hasta el puente de Tetuán, se sigue adelante con la excavación arqueológica que se realiza a cielo abierto.

Al contrato de la obra de la Plaza de la Solidaridad, Fomento quiere sumar en las próximas semanas una inversión trascendental para dibujar el escenario de finalización de la red ya trazada, que permitirá contratar las fases de arquitectura de las estaciones Guadalmedina y Atarazanas y las instalaciones para todo el trazado entre el intercambiador de Renfe y la Alameda Principal. La actuación tiene un coste conjunto de unos 33 millones de euros, montante que obliga a la consejería a contar con el aval del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía antes de poder licitar el contrato.

El desbloqueo de esta etapa de la actuación se producirá cerca de siete meses después de lo previsto por los anteriores responsables de Fomento. Y ello afecta de lleno al calendario de terminación completa de la infraestructura que permitirá alargar la llegada de los trenes hasta el Centro. Incluso en el supuesto de que el Consejo de Gobierno diese validez a la inversión la semana que viene, no parece factible pensar en que la contratación (tras el periodo de licitación necesario y el análisis de las proposiciones) tenga lugar hasta la parte final del ejercicio.

Y a partir de ahí a contar los meses que deben transcurrir para el desarrollo de los trabajos. De acuerdo con lo que pudo saber este periódico, el proyecto técnico que sirve de base a este desarrollo fija un plazo de algo más de 14 meses, periodo que podría rebajarse en el proceso de ofertas. Con todo, la posibilidad cierta de que la culminación de los tramos ahora en obras, Renfe-Guadalmedina y Guadalmedina-Atarazanas, esté a finales de 2020 se difumina. Algo que ya asume la propia Junta cuando en el Presupuesto General de 2019 ya reconoce que la finalización y llegada del Metro al Centro tendrá lugar a lo largo de 2021.

Por otra parte, este miércoles, la consejera y el alcalde, Francisco de la Torre, visitarán las obras del Metro en el puente de Tetuán y presentarán una campaña de reactivación del comercio en la zona.