Las grietas de Carranque empiezan a tener respuesta tras años de reclamaciones

Varias décadas después de que los vecinos de la barriada de Carranque pusiesen de manifiesto la existencia de problemas estructurales en los bloques en los que habitan, causantes de grietas y otros desperfectos en sus viviendas, la Administración empieza a dar respuesta. En este caso es el Ayuntamiento de la ciudad, y no la Junta de Andalucía, que trasmitió la propiedad de estos pisos a los actuales inquilinos a pesar de los problemas existentes, el que acaba de dar el paso para al menos encargar los estudios necesarios para determinar la situación en la que se hayan estas construcciones y la redacción de los proyectos de rehabilitación de los mismos.

No obstante, el paso dado ahora por el organismo municipal se produce casi tres años después de que se produjesen las primeras demandas de los residentes al equipo de gobierno del PP. La actuación, de acuerdo con los documentos oficiales, consiste en la contratación del servicio para realizar el proyecto de rehabilitación y el estudio de seguridad de las obras a desarrollar en 26 edificios de esta barriada. Una labor que sale a concurso con un presupuesto de licitación de 186.071 euros (IVA incluido).

No será hasta que esté elaborado el citado documento, para el que el contratista dispondrá de un máximo de tres meses, cuando se podrán precisar los valores reales de las obras a realizar. Sin embargo, el propio pliego técnico apunta de forma orientativa una inversión que podría rondar los 2,7 millones de euros, a razón de 106.000 euros por edificio.

No se trata, pues de obras baratas. Principalmente porque el deterioro constatado en estos bloques está directamente vinculado con la inestabilidad del terreno sobre el que se asientan. Así lo señalaron años atrás los propios técnicos de la Gerencia de Urbanismo, que señalaron la existencia de "patologías serias estructurales debido al subsuelo, que tiene zonas en las que se produce alteracipnes de aguas freáticas".

Al tiempo, desde el IMV se alude a la existencia de "deficiencias" que afectan a los cimientos y estructuras de los edificios y al estado en general de los bloques. Una situación que, más recientemente, ha sido puesta de manifiesto por la Asociación de Vecinos de Carranque en varias ocasiones, siendo el pasado mes de febrero cuando el director del distrito de Cruz Humilladero remitió una petición oficial a Vivienda para solicitar algún tipo de ayuda que permitiera a las familias obtener un diagnóstico adecuado de las deficiencias de cada bloque y su coste económico.

Pero las reclamaciones de los afectados es muy anterior en el tiempo. Constan escritos de vecinos remitidos en junio de 1991 a la Junta de Andalucía en los que ya se hacía ver la existencia de este problema. "La vivienda que habito desde su fundación, en el año 1961 y que desde su fundación empezaron a aparecer grietas en la junta de dilatación de dicho edificio hasta el extremo de que a los pocos años de habitarla parte del tejado se hundió", relataba uno de ellos. A pesar de las comunicaciones, desde la Administración regional se ha desentendido de la solución.

Los edificios que se van a ver beneficiados por esta iniciativa son los números 74, 62, 45, 58, 80, 94, 92, 68, 61, 60, 41, 90, 84, 106, 39, 78 y 47 de la Avenida de Andalucía; los números 45, 7 y 53 de la calle Virgen de la Cabeza; Obispo Herrera Oria 35 y 33; Virgen del Rocío 71 y 15, y Virgen de la Estrella 10 y 8.