Dos historias paralelas aún pendientes de resolver

La historia del macro complejo urbanístico de Valle del Rosario tiene muchas semejanzas con otro impulsado también en el interior de la provincia pero casi al otro extremo. Ambos prácticamente coinciden en el tiempo y en su desarrollo, con problemas muy parecidos y ubicaciones semejantes. El proyecto de Los Merinos, situado en el término municipal de Ronda, parece como si fuese hermano del impulsado en Villanueva del Rosario.

Desde el inicio el complejo rondeño ha contado con un claro respaldo por parte del Ayuntamiento de Ronda, mientras que la contestación al mismo y la lucha para evitar su desarrollo ha girado sobre Ecologistas en Acción y la Plataforma para la Defensa del Agua, que ha tenido en los vecinos de Cuevas del Becerro a su principal baluarte. Precisamente, el abastecimiento del campo de golf y de las miles de viviendas proyectadas ha sido uno de los grandes caballos de batalla.

De un lado, el Ayuntamiento rondeño aseguró que existen recursos necesarios, mientras la Agencia Andaluza del Agua sigue sin pronunciarse sobre este asunto muchos años después. De hecho, todavía no está resuelto el dotar a la nueva depuradora rondeña del grado terciario, lo que permitirá su uso en el complejo.

Pero no son las dudas sobre la existencia de los recursos hídricos y la lucha vecinal las únicas coincidentes. En los Merinos también se vincula golf y urbanismo, con la construcción de unas 800 viviendas en mitad de un bosque de encinas centenarias y dos campos de golf de 18 hoyos, además de zona comercial y de hostelería.

Otro de los aspectos similares es la larga batalla judicial que lleva recorrido Los Merinos, que ha contado con la oposición de la Consejería de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, quien llegó a pedir la paralización de las obras, y de los propios colectivos ecologistas, quienes consideran que se han podido cometer delitos urbanísticos en la tramitación y todavía mantienen este pulso. No obstante, en el caso rondeño las sentencias vienen dando la razón a los promotores y al Ayuntamiento de Ronda, aunque todavía quedan aspectos por resolver. Los ecologistas acusaron a la empresa promotora de haber acabado con miles de encinas y de no respetar la declaración de impacto ambiental, una acusación que los promotores siempre han negado y han defendido su respeto al medio ambiente.

Además, tras el inicio de las obras de construcción, en ambos casos se ha pedido la paralización provisional de los trabajos, aunque en ninguno de ellos se atendió dicha petición, al considerar que en caso necesario podría restituirse la situación inicial.

En la actualidad sobre los terrenos de Los Merinos todavía no se ha levantado ninguna edificación, y únicamente están construidos parte de los miles de metros de caminos de urbanización. Eso sí, las obras únicamente se encuentran "ralentizadas" por la crisis económica, aunque la empresa promotora podría reanudarlas en el momento que lo considerase oportuno, al contar con la pertinente licencia por parte del Ayuntamiento de Ronda.

Los últimos alcaldes que ha tenido la localidad, con especial protagonismo el antes andalucista y ahora socialista, Antonio Marín Lara, han respaldado este proyecto. La actual alcaldesa rondeña, Mari Paz Fernández, también ha mostrado públicamente su apoyo.