Iñaki Hormaza, profesor del CSIC: "Lo ideal es tener una desalinizadora para cultivos frutales en la Axarquía"

El experto advierte del peligro del cambio climático en Málaga para los aguacates

"Hay que adoptar medidas adaptativas, como el riego de precisión", ha señalado

Expertos abordan cómo el turismo masivo afecta a la sequía en Málaga

José María Ruiz Povedano, Iñaki Hormaza y José Damián Ruiz Sinoga en el Foro Málaga 2024
José María Ruiz Povedano, Iñaki Hormaza y José Damián Ruiz Sinoga en el Foro Málaga 2024 / Javier Albiñana

El cambio climático está en el punto de mira desde los últimos años. La sequía en Málaga ha dejado a los embalses y pantanos bajo mínimos y, como consecuencia, la agricultura de frutos subtropicales de la Axarquía sufre con sus cultivos. El profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Iñaki Hormaza, ha alertado sobre los desafíos a los que se enfrenta debido al aumento de temperaturas, la reducción de precipitaciones y la aparición de nuevas plagas y enfermedades. "Lo ideal sería tener una desalinizadora para el riego de frutales", ha indicado.

En cuanto a los cultivos de la zona, Hormaza ha señalado que los más afectados por el cambio climático son el aguacate y el mango, los dos productos principales de la Axarquía. Según su análisis, el aguacate, que requiere mucha agua para su cultivo, ha experimentado alteraciones en su ciclo de floración. "Hace 20 años, el aguacate florecía en abril, pero ahora lo hace en marzo, lo cual es problemático porque las temperaturas de ese mes aún son demasiado bajas", ha explicado.

El manejo del agua es otro de los temas "críticos" en la Axarquía. Hormaza ha lamentado que el embalse de La Viñuela está "prácticamente seco" en 2024 debido a la escasez de precipitaciones y a la "mala gestión" del agua. El aguacate requiere agua de "alta calidad", con baja concentración de sales, sodio y cloruro, lo que complica aún más el riego en estas condiciones. Para abastecer las 14.000 hectáreas de cultivos, el investigador estima que serían necesarios 74 hectómetros cúbicos de agua, aproximadamente.

El experto ha ahondado en que la clave para enfrentar el cambio climático en la agricultura de la Axarquía es adoptar "medidas adaptativas". Entre ellas, la mejora genética para desarrollar nuevas variedades de aguacates –unas cinco– más resistentes a las sequías y adecuadas a las condiciones de la tierra, el riego de precisión, y la necesidad de dimensionar la extensión de las tierras de cultivo en función del agua disponible.

Hormaza ha avisado de que es "necesario replantearse el uso del agua de regadío" en fincas poco productivas y considerar la introducción de nuevos cultivos "más tolerantes a la escasez de agua". También ha defendido que la oportunidad que representa la producción de aguacates en España, y en especial en Málaga, tiene un enfoque sostenible al tener menos huella de carbono en el transporte: "Tenemos la ventaja de producir con menos huella de carbono por transporte que otros países como Chile, hay que aprovechar eso".

También ha indagado en la proliferación de nuevas plagas, como los thrips, un insecto que ha llegado al país gracias a las condiciones más cálidas que ahora se asemejan a las de los territorios de clima subtropical. La falta de herramientas para combatir estas plagas "agrava aún más" la situación de los cultivos. Hormaza ha mencionado que muchas enfermedades, como las causadas por hongos, afectan gravemente a los árboles, en especial cuando estos ya están debilitados por la falta de agua y el calor extremo.

Durante su intervención, ha destacado que el cambio climático es "una realidad" que su equipo lleva estudiando durante más de 20 años y ha subrayado que los efectos ya son visibles tanto a nivel global como regional. Ha recordado que julio de 2023 fue el mes "más cálido de la historia", un claro indicio que viene acompañado por el aumento del nivel del mar y la concentración de CO2 en la atmósfera.

Bajo el nombre de El futuro de los frutales subtropicales en la Axarquía en un contexto de cambio climático, ha resaltado que los modelos climáticos pronostican una disminución de las precipitaciones en los próximos años, lo que agravará las condiciones de sequía en áreas como la Axarquía, donde la agricultura juega un papel vital en la economía local.

Por su parte, el presidente de la Sociedad Económica, José María Ruiz Povedano, ha hecho énfasis en la importancia de este foro porque el cambio climático es un tema de "especial relevancia". Según ha comentado, es "causado por la actividad humana" con intervenciones como la deforestación o la quema de combustibles fósiles y los gases de efecto invernadero. Además, ha remarcado que esta problemática necesita de "medidas urgentes" para abordar esta crisis.

El Foro Málaga 2024, con la colaboración de la Fundación Unicaja, es una iniciativa centrada en el análisis y búsqueda de soluciones frente a la sequía. Este evento reúne a expertos, académicos, representantes del sector agrícola, empresarios y responsables con el objetivo de fomentar un diálogo constructivo sobre los impactos sociales, económicos y ambientales de la falta de precipitaciones, así como promover estrategias sostenibles de gestión del agua.

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