La “lucha” por la línea entre Málaga y Melilla

MARÍTIMAS

Las navieras Baleária y Armas Trasmediterránea juegan sus cartas para conseguir un contrato estatal de dos años subvencionado con 78,6 millones de euros

El puerto de Málaga sólo recibirá un crucero en febrero

Visitas a barcos en Málaga

Ferris de Armas Trasmediterránea y Baleària que cubren en la actualidad la línea de Melilla. / J. C. Cilveti

Málaga/El inicio el próximo 1 de abril del nuevo contrato estatal que regulará la línea marítima entre los puertos de Málaga y Melilla sustituyendo al vigente, parece que podría retrasarse. Planteadas algunas novedades con respecto al contrato que se está llevando a cabo en la actualidad, las condiciones propuestas por el gobierno de España para las navieras participantes en este concurso pasan por dos requerimientos fundamentales; unos requisitos que atienden a un incremento en la duración del contrato y a la necesidad de que la compañía que obtenga la subvención se haga cargo de las navegaciones entre los puertos de Melilla, Málaga, Motril y Almería.

Frente a estas nuevas condiciones; la de ampliar el contrato de un año a dos y la obligación de tener que cubrir las tres rutas que enlazan con la Ciudad Autónoma de Melilla cuando hasta la fecha existían dos paquetes diferentes: el de Motril y Almería frente al de Málaga, la concesión del contrato 2024-2026 que asciende a 78,6 millones de euros IVA no incluido está en el aire.

Inmersas en esta pugna Baleària, la actual adjudicataria del contrato que expira el 31 de marzo y Armas Trasmediterránea, esta segunda compañía ha decido impugnar esta licitación, motivo por el cual el resultado final del concurso en trámite podría sufrir algún tipo de retraso. Pero con independencia de este hecho que, de no estar resuelto el primer día de abril implicaría que Baleària siguiera como titular, otro factor de polémica añadido se suma con las propuestas que desde la Ciudad Autónoma se han trasladado al ministerio de Transporte y Movilidad Sostenible; un pliego de requerimientos que plantea el mantenimiento por separado de los paquetes Almería, Motril y Málaga, siete rotaciones semanales desde aguas malacitanas, viajes extraordinarios, un buque rápido desde el puerto de Málaga durante la Operación Paso del Estrecho así como unos horarios más flexibles que no queden al criterio de las navieras.

Servida esta polémica y sin saberse cómo evolucionará la final adjudicación de este contrato estatal, lo que sí parece claro es que Baleària tiene la intención de sustituir a su ferry Rusadir por el Hypatia de Alejandría en la ruta entre Málaga y Melilla; un significativo cambio que paradójicamente y a tenor de unas recientes declaraciones del presidente de esta compañía se realiza para asegurar que Baleária consiga este concurso.

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