Desmantelan un macrobotellón en el polígono San Luis de Málaga, con un furgón que les servía la droga

La noche del sábado al domingo 18 de septiembre, un macrobotellón se adueñó del polígono San Luis, situado en la calle Veracruz. Decenas de personas consumiendo bebidas alcohólicas, vehículos con las puertas abiertas y música a gran volumen, y un furgón dedicado a la venta ambulante de drogas fue el escenario que encontró la Policía Local de Málaga y que tuvo que disolver.

Sobre las 00:30 horas, varias unidades de la zona del Grupo de Investigación y Protección (GIP), del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) y Unidad Canina realizaron un despliegue en el lugar para proceder al desalojo paulatino de la multitud.

Durante la actuación, los agentes del GIP, que prestan su servicio de paisano, comenzaron a sospechar de una pareja que se encontraba junto a una furgoneta, pues, cuando se percataron de la presencia policial, se marcharon de modo apresurado, según informan fuentes policiales.

Así, los investigadores los interceptaron y comprobaron que la mujer llevaba en una riñonera varias bolsas termoselladas que contenían distintas drogas en pequeñas dosis: hachís, cocaína, ketamina, speed y MDMA, además un llavero con forma de pala como dosificador. Tras ser cacheada por una agente, también se le localizó bajo su sujetador otra bolsa con otros cuatro envoltorios, además de varios billetes. Asimismo, estas mismas fuentes apuntan que, a lo largo de la intervención policial, la mujer no paraba de recibir llamadas de diferentes números de teléfono.

Pese a que el hombre que la acompañaba hizo ademán de marcharse del lugar, los agentes, junto a otros compañeros del GOA que acudieron en apoyo, lograron detenerlo en su huida y comprobaron que también portaba una bolsa con una gran cantidad de plásticos termosellados en su interior, así como un envase de plástico con otros tres envoltorios de mayor volumen que los anteriores oculto en su ropaje y algunos billetes.

Los policías locales también inspeccionaron la furgoneta en la que se desplazaba esta pareja, localizando en la parte delantera un bote que contenía éxtasis líquido y una bolsa de plástico con recortes utilizados para realizar los envoltorios termosellados.

Ante la posibilidad de que pudiera haber más sustancias estupefacientes ocultas en el interior del vehículo, una dotación de la Unidad Canina se desplazó hasta el lugar, realizando un registro más exhaustivo en el que una perra policía localizó bajo el asiento del copiloto un bolso con restos de sustancia estupefaciente y un total de 270 euros fraccionados en billetes.

Debido a la gran cantidad de dosis de drogas incautadas y el total de 310 euros intervenidos -procedentes supuestamente de su actividad ilícita-, los policías locales procedieron a la detención de ambos y a su traslado a dependencias policiales, para, posteriormente, ser puestos a disposición judicial.

Asimismo, los policías locales cachearon esa noche a un total de 69 personas, de las que 20 fueron denunciadas por botellón y 16 por consumo o tenencia de sustancias estupefacientes, además de localizar e intervenir en uno de los cacheos un arma blanca cuyo portador fue igualmente denunciado.

Dos de los propietarios de vehículos también fueron denunciados por la Ordenanza de Convivencia con motivo del fuerte volumen de los equipos de música. Además, los policías locales intervinieron en uno de los casos unos altavoces, pues afirman que el sonido del macrobotellón del polígono San Luis llegaba incluso a la barriada de Sánchez Blanca, pese a la distancia.