Málaga es la tercera provincia del país que más empleo tecnológico demanda

Málaga/Málaga es la tercera provincia del país que más empleo tecnológico demanda. En concreto, actualmente quedan sin cubrir un total de 1.380 ofertas publicadas en diferentes portales de inserción laboral, aunque muy lejos de Madrid (15.501 ofertas) y Barcelona (7.338), según los datos del Mapa del Empleo en este segmento emergente de la Fundación Telefónica.

Es esta una herramienta interactiva que, gracias a las tecnologías de Inteligencia Artificial y Big Data, analiza la oferta laboral en España y muestra las profesiones y habilidades digitales más demandadas, así como su evolución en el tiempo en relación con lo publicado en cuatro portales web especializados en la búsqueda de empleo: Infojobs, Tecnoempleo, TicJob y Buscojobs. Los datos de último muestreo son de principios de marzo, lo que indica una bajada, pues en enero de 2025 eran casi 1.500 las ofertas registradas en la provincia.

El top cinco de profesiones y perfiles más buscados en Málaga es el siguiente: hay 210 ofertas para desarrolladores de softwares, 128 para consultores TIC (aconseja a las organizaciones cómo usar las tecnologías de la información para conseguir sus objetivos empresariales), 99 plazas para desarrolladores de backend (desarrolla la arquitectura interna de una web o aplicación móvil para que todo el contenido se integre y fluya correctamente), 91 técnicos de TIC (da soporte a las empresas a través de la gestión de los sistemas y redes de información y comunicación de la organización) y 85 para el puesto de digital project manager (planifica, dirige, coordina y evalúa las actividades del desarrollo de un proyecto digital).

“La herramienta trata de medir la efervescencia tecnológica existente gracias a la acelerada transformación a la que han tenido que adaptarse todas las empresas y que requiere, más que nunca, de profesionales en tecnología. Tendencias como la inteligencia artificial, la ciberseguridad o el Big Data propician el crecimiento, desarrollo e innovación que facilita la evolución de la sociedad y los sectores productivos, esta explosión tecnológica también ha puesto de manifiesto la falta de profesionales especializados en estos ámbitos”, explica la Fundación Telefónica.

El 80% de los trabajos en 2030 serán nuevos

De cualquier manera, el horizonte pasa por el desarrollo tecnológico del país: según el Foro de Davos, durante los próximos años, tanto la industria como las empresas van a cambiar las habilidades que les piden a sus equipos dado que se espera que en 2030 alrededor del 80% de los trabajos más demandados sean nuevos, indica la fundación.

Tras Málaga se sitúa, en este ranking, Valencia, con 1.358 ofertas sin cubrir y Sevilla, con 906, entre otras. En España, son 52.368 las plazas sin cubrir que existen en los distintos sectores tecnológicos.

En Málaga capital, la Fundación Cotec tasó en casi 20.000 empleos los existentes en el sector tecnológico, tras crear 7.061 desde la pandemia (2019-2024), mientras que Sevilla creó 7.530, superando los 32.000. El dato de Málaga ciudad fue criticado en algunas instancias ya que, aunque es cierto que los puestos de trabajo continúan aumentado en el segmento tras la llegada de empresas como Google, Dekra, Vodafone o Globant, la capital andaluza posee un nicho laboral mucho mayor.

En el ranking de las ciudades españolas de entre 200.000 y más de 500.000 habitantes, Málaga ocupa la decimoquinta posición (6% de empleo tecnológico en relación a los puestos de trabajo generales), muy lejos de Vigo (13,2%), líder de la lista.

Los especialistas de la Fundación Cotec recuerdan que el nivel de renta está muy relacionado con el empleo tecnológico, existiendo una relación compleja entre el sector servicios y este tipo de ocupaciones líquidas.

Pese a todo, varios de los especialistas que han acudido esta semana a Transfiere, Foro Europeo de la Ciencia, la Innovación y la Tecnología, que se ha celebrado en el Palacio de Ferias y Congresos de la capital, han señalado que el ecosistema tecnológico malagueño tiene fuerza, precisamente, por la apuesta institucional por la innovación y los sectores digitales, lo que se ha traducido en un rosario de llegadas de compañías de renombre internacional y el crecimiento de algunas empresas como Freepik, que se bate de tú a tú con los gigantes mundiales de la industria del stock de imágenes y recursos para diseñadores y creadores de contenido y de la inteligencia artificial generativa. El empuje institucional, han precisado estos expertos, no es igual en otras zonas, lo que lastra la consolidación de un entorno tech. Sin embargo, el tejido tecnológico malagueño está plagado de empresas emergentes o, incluso, de tamaño micro, lo que lastra el empleo.

La llegada de IMEC, centro puntero en la creación de chips que requiere de una inversión de 615 millones y que estará abierto en 2030 en Málaga, será una de las claves de la expansión de la industria tecnológica local, precisamente porque necesitará de numerosos proveedores, creando por tanto, en su entorno inmediato, una industria auxiliar como la brota en el perímetro que rodea a los puertos o los aeropuertos. Fuentes del sector insisten en que va a haber nuevas llegadas a Málaga de proyectos tractores, lo que tendrá un efecto multiplicador positivo, aunque hay cierto excepticismo en algunas instancias, porque los mismos expertos consideran que, para que crezca el sector, es esencial que la ciudad resuelva problemas tan graves como el acceso a la vivienda, la movilidad o la disponibilidad de agua.

Algunos líderes del segmento han indicado en varias ocasiones que es esencial vincular lo que sucede en la industria innovadora de la capital con las empresas de la provincia, creando una estrategia territorial similar a la que preconizan los expertos en movilidad o urbanismo. Y, por otro lado, es clave que el parque pueda crecer para doblar su capacidad de crear empleo (en torno a 25.000 ahora), pero para ello deben resolver los cuellos de botella de movilidad que ahogan a la infraestructura (no llegan ni el metro ni el cercanías). Hay claroscuros en la industria tech local.