Una firma malagueña diseña almacenes para un proyecto de mejora agrícola en Senegal
Un equipo multidisciplinar de 14 personas ha creado cinco modelos de naves para que no deterioren los productos por no tener una cadena de conservación adecuada
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Senegal es un país con una gran riqueza agrícola. Es el cuarto productor mundial de cacahuete, tiene cifras importantes de mijo, arroz y maíz, además de huertas con una gran variedad de productos hortícolas y, como cultivo emergente, el sur se está llenando de mangos. Sin embargo, y como ocurre en muchos países del África subsahariana, se pierden muchos alimentos por no tener una cadena de conservación adecuada. Se calcula que un 30% de lo recogido no llega ni a la población ni puede comercializarse porque se deteriora antes de su venta. Esta problemática ha sido abordada por la firma malagueña Gestomer Ingeniería. Junto a un socio español, Globaltec, un equipo multidisciplinar de 14 personas ha realizado un proyecto de almacenes para el Gobierno senegalés con cinco tipologías diferentes, específicas para cada materia prima, con el objetivo de mejorar la capacidad agrícola de este país.
Arquitectos, ingenieros de caminos, ingenieros industriales, agrónomos, ingenieros de montes y personal especializado en la parte social e inclusión de la mujer han realizado este proyecto que cuenta con tres partes diferenciadas. Primero hicieron un master plan, un estudio exhaustivo con tres viajes de campo para conocer bien las condiciones sobre el terreno. Luego un estudio de detalle, el diseño de las naves de almacenaje y, por último, un plan de negocio en el que "poner números a todo esto".
Javier Ruiz es el director general de Gestomer Ingeniería, una empresa asentada en Málaga hace 14 años y que trabaja en el extranjero desde 2012. Han hecho proyectos industriales y de obra civil en Chile, Angola y Armenia. Hace un año trabajan junto a Globaltec para desarrollar este plan para el Gobierno de Senegal a través de financiación española. "De estos cinco modelos de almacenes se calcula que se van a hacer unos 90 en todo el país en un tiempo que el Gobierno tendrá que determinar", destaca Ruiz y comenta que en una primera fase se construirá una veintena.
"Este master plan ha consistido en estudiar las necesidades básicas de la agricultura del país, cómo se distribuyen ahora, cómo se comercializa, cuáles son sus problemas legales, sanitarios, y allí hemos descubierto que sí hay producción agrícola pero que está muy mal optimizada. Se pierde una gran cantidad de materia prima porque no se almacena bien", subraya el ingeniero. Luis Muñiz, ingeniero agrónomo, ha acompañado a Ruiz en todo el proceso. "Hemos determinado los productos principales del país, tanto a nivel comercial como nutritivo, y hemos intentado darles una solución técnica con los almacenamientos", explica el agrónomo.
Cacahuete, cereales, arroz, hortícolas y mango
Los productos que han identificado más importantes son el cacahuete, como cereales el maíz y el mijo, otro almacén que han creado ha sido específico para el arroz, una de las bases de la alimentación senegalesa y producto estratégico, otro para productos hortícolas y el quinto para el mango como el cultivo más emergente. Para el arroz, por ejemplo, "hemos diseñado un almacén moderno, con silo, con una unidad para semilla, que es una gran necesidad que tiene el país, y el descascarillado", detallan los expertos.
El director general de Gestomer Ingeniería apunta que "el mundo de la semilla es muy complejo" y que son las multinacionales las que las controlan "Es imposible tener semillas de calidad para producir, tienes que comprarlas, pierden todo el vigor y la calidad, porque si una parte la guardan pero sin las medidas necesarias de conservación, se estropea", añade. Subraya Luis Muñiz que han provisto estos almacenes de cámaras frigoríficas para que las semillas estén controladas de temperatura, de humedad y "puedan tener al final una semilla de calidad".
"Aunque tengan producción, al no gestionarlo bien, el campo se les muere y también se está dando el caso de que muchas empresas europeas están alquilando tierra para producir allí, así que con este proyecto se pretende que el propio Senegal sea el que produzca y que, además, el senegalés no tenga la necesidad de irse a Europa, que esa es otra de las consecuencias derivadas", indica Ruiz.
Un plan que incluye una labor social
Además de la parte técnica, el estudio ha contado con una parte social. "Hemos hecho una labor de campo muy importante, el proyecto ha contado con tres misiones en las que nos hemos recorrido el país de cabo a rabo, hemos estado más de 25 días en Senegal, hemos hablado con mucha gente. Había sitios donde la gran demanda que nos llegaba es que se hiciera algo porque los jóvenes se van del país, que les diésemos alguna herramienta para mejorar las condiciones del campo y poder retener a los jóvenes con algún trabajo", comentan los ingenieros.
En el proyecto realizado por la firma malagueña, se ha planteado que el almacén sea un germen para atraer a otras industrias agroalimentarias alrededor de él. "Nosotros hemos diseñado un almacén muy moderno y muy eficaz para almacenar el cacahuete, pero detrás del fruto está la mantequilla del cacahuete y otros productos, lo que espera el Gobierno es que esa industria que está detrás de estos productos se vaya fortaleciendo alrededor de los almacenes", dicen los expertos.
Los técnicos visitaron por todo Senegal a agricultores, grupos de mujeres, mercados, conociendo los almacenes que existen ahora mismo, que son poco más que un techo y un suelo de hormigón, naves sin terminar, sin ventilación adecuada o, simplemente, sacos apilados en la calle. "El Gobierno lo que quiere es implantar un sistema de almacenamiento eficaz y moderno", reitera el ingeniero agrónomo y señala que han trabajado para ORSRE, un organismo público del Ministerio de Comercio
"Los almacenes se han creado en función del producto y pensando en que no fueran excesivamente tecnológicos y con materiales que se puedan cambiar fácilmente si se rompen", dicen los responsables del proyecto. Se abastecerán con electricidad, sobre todo los tres modelos de nave que llevan frío. La de los cereales, que está pensada para almacenamiento a granel, está pensada con muros de hormigón donde se apoya ese material y "no se necesita nada más, solo aislado del exterior y con unas condiciones de ventilación adecuadas, porque ahora mismo los echan en sacos y lo dejan en la calle", apuntan. Para el cacahuete, tras la clasificación y limpieza, se guardará en sacas de un metro cúbico para que no se aplaste la cáscara y no se rompa.
El proyecto está en su última fase. Una vez que lo reciba el Gobierno de Senegal, lo sacará a concurso internacional y se presentarán las constructoras para levantar estos almacenes que pueden suponer un cambio de gran calado en África. "Senegal tiene un alto potencial en agricultura y es una pena lo que se pierde por no tener un buen almacenamiento", reitera Javier Ruiz.
Una vez que se puedan poner en marcha estas estructuras, el agricultor llevará al almacén su producción y obtendrá un recibo con un tanto por ciento del producto antes de su venta. Con esta financiación se pretende que pueda continuar con su labor. Una vez realizada la comercialización, se liquidará el total según el precio alcanzado. De esta forma desaparecen en cierta medida los intermediarios, aunque estén también involucrados en el nuevo sistema, y el agricultor tiene mayores resultados económicos. Además, reduce pérdidas porque se garantiza la buena conservación de la cosecha. Y con ella, el bienestar de muchas familias senegalesas.
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