Un 27% de los malagueños que acuden a las procesiones pertenece a alguna cofradía

Banderas conversa con De la Torre mientras posan con el estudio. / C. Pajariño

Málaga/La Semana Santa genera una expectación en la capital que los datos avalan. Así lo confirma la Cátedra de Estudios Cofrades de la Universidad de Málaga una vez más con el estudio que presentó hace un año centrado en la Semana Santa de 2016 y que ha vuelto a desgranar esta mañana para “dar difusión” al impacto de una de las semanas grandes de la ciudad. En concreto, en torno a un 27% de los malagueños y hasta un 4,5% de los turistas que visitan las procesiones cada año pertenecen a alguna de las cofradías de la capital, lo que da cuenta del “arraigo de la industria cofrade” en la sociedad, según ha explicado el director de la cátedra, Benjamín del Alcázar.

"Muchas veces cuando se analiza el impacto turístico se hace como consecuencia de las propias vacaciones de Semana Santa, pero aquí nos centramos exclusivamente en las motivaciones de venir a ver las diferentes hermandades", ha indicado Del Alcázar al hablar de un estudio que ofrece una buena puntuación de residentes y turistas a la Semana Santa, con un 8,08 y un 8,27 sobre 10 respectivamente. La asignatura pendiente de dicha tradición es penetrar aún más en el sector femenino, ya que solo el 42,8% de los malagueños que visitan o participan de ella son mujeres, una minoría que se mantiene en el caso de los visitantes, con el 44,4%.

Por su parte, el actor y presidente de la Fundación Lágrimas y Favores, Antonio Banderas, se ha congratulado de la mayor concienciación de las cofradías por "implicarse en labores sociales" para los más necesitados. "Para mí, la Semana Santa del siglo XXI tiene que tener las 'tres s': Semana Santa solidaria", ha indicado el intérprete, añadiendo su deseo de que "cuando la gente vea la virgen de Lágrimas y Favores -imagen de la que es mayordomo de trono- sepa que también hay una labor social detrás, que esto no es solo oro y decoración". La Fundación Lágrimas y Favores ha repartido en sus ocho años de vida cerca de un millón y medio de euros entre distintas causas solidarias.