El falso médico rehabilitador de Rincón de la Victoria sigue pasando consulta tras ser detenido

This browser does not support the video element.

Así fue la detención del hombre que se hacía pasar por médico.

El hombre que se hizo pasar por médico rehabilitador durante más de 30 años y que fue detenido la semana pasada por supuestamente estafar 300.000 euros solo a dos pacientes -según informó la Guardia Civil- continúa recibiendo a pacientes en una habitación situada en la vivienda de sus familiares, en Rincón de la Victoria, como ha podido comprobar este periódico.

En una casa mata ubicada en Torre de Benagalbón, el falso médico que -según los pacientes consultados- lleva a cabo principalmente funciones de fisioterapeuta ha continuado este martes pasando consulta. Al ser preguntado por este periódico, justificó que había sufrido "una suplantación de identidad". Uno de los pacientes -residente en Periana-, que esperaba su turno mientras su mujer era atendida, cuenta que sufrió un accidente de tráfico. "No podía ni andar y ahora estoy bien gracias a él", asegura. Tras asistir a la rehabilitación de la mutua y no notar mejoría, explica que decidió ponerse en sus manos: "A partir de ese momento yo voy a ir siempre donde esté él", afirma.

Insiste en que nunca ha dudado de su credibilidad, pues relata que su padre fue intervenido quirúrgicamente en un hospital público de la capital malagueña y que fue a visitarlo aprovechando que "estaba trabajando allí". "Estaba vestido con el uniforme (bata sanitaria) y todo", apunta. Otro de sus pacientes también relata a Málaga Hoy que en alguna de las sesiones le había comentado que trabajaba en el Hospital Regional Universitario de Málaga.

Por su parte, el Colegio de Médicos afirma que el abogado de la asesoría jurídica de la asociación de profesionales, Antonio Moya, averiguó que era incierto que el falso médico trabajase en el Universitario Virgen de la Victoria (El Clínico), como decía a algunas personas a las que atendía. Asimismo, desde la asociación de profesionales aseguran de que el supuesto facultativo no está colegiado en Málaga ni en otro colegio del territorio nacional.

Sin página web conocida ni número de teléfono en internet, el falso médico se hizo con un gran número de clientes gracias al de boca en boca. Y es que su fama en la provincia aparentemente era buena. "Yo lo conozco desde pequeño y siempre han dicho que es muy buen fisio. De hecho, yo había pensado en ir porque todo el mundo habla maravillas", reconoce uno de sus vecinos. Otra, en cambio, cuenta que su marido fue a hacerse un masaje hace 17 años y no quedó contento. "No le pareció muy profesional porque lo atendió en el salón de la casa de su madre".

José (nombre ficticio) relata que sufrió un ataque de lumbalgia y un amigo le recomendó sus servicios. Acudió a tres sesiones y el tratamiento, siempre según su relato, era: un masaje y la aplicación de un gel de calor. "Me decía que utilizaba el método Indiba. Me aplicaba un tipo de medicación en la espalda untada y la verdad es que a mí se me calmó el dolor". Sin embargo, recuerda que al percatarse de que en las paredes de la consulta no colgaba ningún diploma sobre sus estudios -como suele ser habitual en clínicas de facultativos- le preguntó por su formación. "Me dijo que era médico rehabilitador y que daba clases en la Universidad de Granada", información que también reza en su perfil de LinkedIn y que desde el Instituto Armado desmienten, pues aseguran que para su presunta labor de docente tampoco poseía la titulación habilitante.

Los hechos fueron denunciados por el familiar de una paciente que contactó con el Colegio de Médicos de Málaga tras tener sospechas de que podría no estar colegiado. De esta manera, agentes del Puesto Principal de la Guardia Civil de Rincón de la Victoria iniciaron una investigación y comprobaron que existía una gran afluencia de personas que acudían para ser tratadas de enfermedades varias a la consulta privada del individuo. Al confirman que carecía de cualquier título de ámbito sanitario, procedieron a su arresto por un presunto delito de intrusismolaboral y de estafada agraviada.

Asimismo, los investigadores registraron su domicilio, donde hallaron documentación e informes médicos, análisis de sangre, ecografías y resonancias magnéticas de varias personas, así como dos agendas que contenían citas de clientes y sus posteriores cobros por los tratamientos recibidos. En los documentos también aparecía impreso un sello con su nombre como médico rehabilitador y un número de colegiado.

El presunto responsable llevaba "ejerciendo" la profesión de médico desde hace más de 30 años y habría llegado a estafar unos 300.000 euros, solo a dos pacientes -según fuentes del Instituto Armado. De momento, los agentes continúan investigando los hechos al no descartarse que pudieran existir más personas afectadas y que la cantidad que el detenido hubiese conseguido estafar fuese bastante mayor. Es por ello que desde el Instituto Armado animan a los pacientes con tengan sospechas de haber sido víctimas a denunciar.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último